Un proyecto del IFDC San Luis fue preseleccionado por la UNESCO

Se trata de “Centinelas del clima: la educación rural frente al cambio climático en la provincia de San Luis”. El proyecto participará de la elección final entre los siete que la Argentina puede presentar a nivel internacional. 

El IFDC San Luis viene trabajando desde el año 2018 en proyectos de investigación que vinculan el cambio climático y la educación, con intención de contribuir a construir una ciudadanía responsable y resiliente frente al cambio climático. La institución formó parte de la Red PEA-UNESCO y constituyó junto a 27 escuelas rurales una red para el abordaje de temas vinculados al ambiente, la REAAM (Red Escuelas Amigas del Ambiente).

En esta oportunidad un equipo de investigación interdisciplinario presentó el proyecto “Centinelas del clima: la educación rural frente al cambio climático en la provincia San Luis” en la convocatoria nacional denominada Programa de Participación de la UNESCO para el bienio 2024-2025, y quedó seleccionado para participar de la elección final entre los siete proyectos que la Argentina puede presentar a nivel internacional. La Comisión Nacional Argentina de Cooperación con la UNESCO (CONAPLU) fue la encargada de gestionar y comunicar el proceso de convocatoria en nuestro país.

El Proyecto involucra el trabajo colaborativo con 27 escuelas, 2.711 estudiantes, 27 directivos y 120 docentes y aplica el enfoque escolar integral respetando el desarrollo sostenible, a través de la innovación tecnológica, mejorando la enseñanza y el aprendizaje y la alianza con las comunidades locales. Tiene como propósito mejorar el acceso a la información para la prevención y acción ante eventos climáticos extremos y contar con información confiable para la enseñanza de las características ambientales a escala local, para lo cual prevé la adquisición, instalación y capacitación para el uso técnico y pedagógico de estaciones meteorológicas en las escuelas.

Pretende además ser punto de partida para una reforma en la enseñanza en las escuelas rurales, con acciones pedagógicas desde un aprendizaje por acción que impacten sobre el conocimiento de elementos y factores meteorológicos, contribuyendo a minimizar la vulnerabilidad y detectando las fortalezas ambientales locales, en el contexto de los efectos de cambio climático.