Maestros del interior compartieron su experiencia con la robótica
Alrededor de 30 docentes de Naschel, San Francisco, Unión, Buena Esperanza y Justo Daract, trabajaron durante toda la jornada con los kits del plan Todos a la Robótica, que dirige la ULP. Fue el segundo encuentro de intercambio realizado en el campus universitario.
Con la premisa de compartir la experiencia de implementar la robótica escolar, y seguir capacitándose en la enseñanza con los robots, cerca de 30 maestros del interior de San Luis se reunieron hoy en la Universidad de La Punta (ULP). Desde las 09:00, docentes de Naschel, San Francisco, Unión, Buena Esperanza y Justo Daract aprendieron programación y profundizaron su aprendizaje en la materia. Por la tarde, los educadores compartieron la metodología de trabajo que utilizan con los alumnos dentro del plan Todos a la Robótica. Se trata de una nueva iniciativa que la ULP desarrolla en paralelo al modelo 1 a 1 Todos los Chicos en la Red, que emplea los robots como vehículos para el abordaje de las materias escolares.
En un clima de compañerismo, y luego de una charla introductoria sobre educación y tecnología, los docentes pusieron manos a la obra. El primer desafío consistió en la construcción de un auto robot con motor. En grupos de tres y ayudados por la plataforma digital del proyecto, los maestros debían realizar el vehículo con las piezas del kit educativo. El tiempo otorgado para realizar esta tarea fue de 25 minutos.
Cristina Algañaraz, docente de segundo grado de la escuela Nº 440, de Fortín el Patria, paraje ubicado a 38 kilómetros de Buena Esperanza, contó que a través de sensores, motores y una plaqueta, lograron que el robot tuviera movimiento hacia adelante y hacia atrás. “Seguimos todos los pasos por la plataforma para poder armarlo. En la construcción fuimos rápidos, pero el funcionamiento nos costó un poco por el tema de la programación, tuvimos que consultarle al profesor”, agregó la maestra.
En cuanto al trabajo que realizan en el aula, Algañaráz añadió que después de la primera capacitación, donde aprendieron a construir “la torre más alta”, llevaron esa experiencia para trabajar con los alumnos. “Con los chicos también armamos torres, puentes y hasta un auto, pero sin motor. A ellos les gusta mucho la robótica, les llama la atención. Los primeros pasos se les dificultan, sobre todo con las piezas chicas, pero con la práctica vamos a avanzar rápido”, explicó.
Uno de los objetivos principales de Todos a la Robótica es aplicar la herramienta transversalmente en todas las asignaturas. La docente manifestó que utilizarán la robótica para trabajar en Física. “Queremos estudiar el tema de la fuerza. En una de las actividades que hicimos en la capacitación, enseñaban la construcción de una catapulta, un buen ejemplo para estudiar la fuerza. También lo relacionamos a la matemática, en lo que es medición” puntualizó.
Por su parte, Marta Cristina Bianchi, docente en Lengua y Ciencias Sociales, de la escuela Nº 250, de Naschel, sostuvo que luego de la capacitación en la localidad de Concarán quiso participar de este encuentro porque aprendería a programar su primer robot. Y así fue. Después de estudiar el funcionamiento de las distintas piezas del kit, ella y sus dos compañeras lograron, con éxito, hacer el auto robot.
La maestra también contó su experiencia en el aula. Sin dudas, la actividad que consiste en construir “la torre más alta”, es la elegida por los docentes a la hora de buscar que los alumnos se mimeticen con las piezas y reconozcan su utilidad. “Fue un gusto ver a los chicos cómo trabajaban. Esta herramienta les despierta la creatividad y la imaginación, algo que nosotros en la primera capacitación no logramos. El trabajo con los kits empezó a las 8 y tuvimos que terminar a las 12, porque querían seguir. Es algo muy enriquecedor”, aseveró Bianchi.
