ZANJITAS
sábado, 28 diciembre de 2013 | 15:42

“Mi casa propia parecía un sueño imposible, pero se me dio”

En el pueblo todos la conocen como “Pirucha”. Ramona Fernández es la enfermera que todos consultan por cualquier dolencia y ayer recibió las llaves de su casa del plan Radicar Salud de la mano del gobernador Claudio Poggi. 

Nacida y criada en Zanjitas, de jovencita su esposo Miguel se la llevó con él por cuestiones de trabajo a vivir a Beazley por algunos años, donde también ejerció la enfermería, pero siempre quiso volver a su lugar y así lo hizo.

Hace más de 12 años que es la enfermera de la localidad. Tiene tres hijos: Stela Marys, Miguel Ángel y Jonathan José, que le han dado cuatro nietos: Juan Gabriel, Agustín, Samuel y Lucía Jazmín: “la regalona que siempre quiere quedarse conmigo y su abuelo los fines de semana. Tiene cinco añitos y también voy a sumar a mis dos nietas del corazón, Aldana y Débora” dijo con una amplia sonrisa.

Ramona reflexionó respecto el momento en el que casi renuncia a la vivienda que ayer recibió, por la enfermedad renal que atraviesa su esposo y hace que deba trasladarse a la ciudad de San Luis para dializarse, “Dios sabe por qué hace las cosas, ¿no? – explicó pensativa – yo creí que alguien más iba a poder disfrutar de esta hermosa casa, pero afortunadamente las cosas se dieron así y cuando me llamaron para decirme que me la adjudicaban, casi no lo podía creer. Mi casa propia parecía un sueño imposible, pero se me dio después de tantos años”.

Nadie en Zanjitas puede dejar de recordar la tragedia que enlutó a toda la provincia: “Ese día yo debería haber trabajado como nunca, pero estaba en Córdoba con mi esposo Miguel porque le hacían todos los estudios de compatibilidad para un trasplante de riñón. Lo único que pude hacer fue rezar, rezar con todas mis fuerzas para que todo se resolviera y le pedí al médico que nos dejara volver antes para tratar de ayudar, pero fue imposible – dijo con los ojos vidriosos -, pero al menos ‘mi sangre’, mi hijo Miguel Ángel estuvo ayudando en absolutamente todo lo que pudo”, explicó orgullosa.

Junto a su esposo recorrió su nuevo hogar. Observó detenidamente cada detalle. Todo le parecía perfecto y hermoso. Destacó el espacio para los placares de las habitaciones: “Hasta da la sensación que va a ser muy fresca. Hace bastante calor, pero da gusto estar aquí” sentenció feliz.

Pirucha y su familia en su casa nueva

Pirucha y su familia en su casa nueva

Nota y foto: María José Barroso – Prensa y Comunicación Ministerio de la Vivienda