lunes, 21 enero de 2019 | 13:00

Balance 2018: se ajustó para pagar más intereses

Casi sin inversión (1,1%) Nación ajustó para cumplir con el FMI. Lo único que estuvo por encima de la inflación fue el pago de la deuda. Pese al ajuste el resultado fiscal de las cuentas es peor que en 2015.

El Ministerio de Hacienda de la Nación, publicó las cuentas de Argentina en 2018.

El ministro Dujovne, con cierto beneplácito anunció que se redujo el déficit primario de 3,8 a 2,4 puntos del PBI. Si usted sintió el ajuste, piense lo que será en 2019, en el que el Gobierno prevé llegar a 0. En 2018 se ajustó 1,4 puntos, en 2019 se prevé ajustar otro 2,4.

Gasto primario es todo lo que invierte el Estado para crecer y lo que utiliza para funcionar. No se computa en esa cuenta el pago del capital y los intereses que adeuda. Por lo cual anunciar como exitoso haber disminuido el gasto primario y sostener que se equilibrará este año, es como que usted anuncie con alegría que utilizó menos recursos este año para que su familia viva y que solo gastó en 2018 $24.000 menos de lo que le ingresó. Y si le preguntan pero ¿no tenías deudas con los bancos? Usted responda: eso no lo computo, total tarjeteo, le pido a las financieras y unos usureros que conozco. ¿Pero cuánto pagaste de intereses? Usted responde: $28.000. Su amigo le dice: pagaste más intereses que lo que dejaste de invertir en tu familia.

Según el FMI, el déficit fiscal argentino en 2015, era de 5,1 puntos del PBI. En 2018, y luego de aumentar las tarifas, quitar subsidios, hacer perder en términos reales el poder adquisitivo de trabajadores, jubilados y casi sin invertir en progreso, el déficit fiscal es de 5,2, según el Ministerio de Hacienda nacional.

Solo algunos datos. En Prestaciones sociales el gasto nominal fue 27,6% más que en 2017, y las inversiones en capital un 1,1% más. Si se tiene en cuenta que la inflación fue de 47,6%, lo perdido por los beneficiarios sociales en su conjunto fueron más de 15% y la inversión para el progreso del país, se redujo drásticamente.

A las pérdidas económicas, hay que sumarle la pérdida de soberanía política, pues en la propia agenda del informe del Ministerio de Hacienda, se lee en el punto 2 “Cumplimiento meta FMI 2018”.

 

Dujovne, un buen alumno del FMI, ajusta más de lo que aquél le solicita.