CICLO LECTIVO 2024
Una visita para agradecer la hospitalidad
En su paso por Villa Mercedes, el gobernador Claudio Poggi, le dedicó un rato al colegio Sagrado Corazón, uno de los más emblemáticos de la ciudad. El motivo fue agradecerles a los directivos, que el año pasado cedieron una parte de las instalaciones para que los chicos de la escuela N°444 no perdieran el año, ya que su edificio había sido destruido por la tormenta.
Antes de la visita a la escuela de Nivel Inicial N°22, el Gobernador había ingresado a otro tipo de colegio, uno de gestión privada y emblemático en Villa Mercedes como es el ‘Sagrado Corazón’. Ya su matrícula habla de la envergadura: más de 1.000 alumnos estudian en sus aulas.
“Estamos muy contentos de recibir al gobernador Poggi. Vino a modo de agradecimiento, ya que el año pasado, por la piedra y las tormentas que tuvo Villa Mercedes, le cedimos parte de nuestro edificio a la Escuela N°444. Quería conocer dónde habían estado trabajando y también los planes que tenemos para este año”, contó la directora, Laura Page, quien agregó que “el ciclo lectivo lo empezamos con total normalidad. El 22 de febrero nos presentamos directivos y docentes y el 26 empezaron los alumnos sin inconvenientes”.
Poggi transitó los pasillos del colegio católico acompañado por las autoridades que le describieron cada rincón y el funcionamiento general. En cada aula a la que ingresó, tuvo un acercamiento con los chicos de Nivel Primario, jugó con los de primer grado e incluso completó junto con algunos de ellos tareas escolares que estaban desarrollando en clase. Les dejó mensajes de aliento de cara a lo que se viene en el ciclo lectivo, conversó con docentes del Nivel Inicial y Primario, y les deseó buena suerte para el resto del año.
Para finalizar, ingresó a la capilla que posee la escuela y estampó su firma para siempre en el cuaderno institucional con el fin de dejar un recuerdo eterno de una visita muy valiosa para el Sagrado Corazón.
Como en cada escuela que visita, el Gobernador vivió un momento particular, fruto de la inventiva y la frescura de los chicos. Al preguntar: “¿Cómo están? ¿estaban con ganas de arrancar?”, un niño le contestó: “No muchas, pero acá estamos”.