SUBSIDIO AL EMPLEO
El sector privado se nutre de más beneficiarios de planes sociales que apuntan al trabajo formal
El gobernador Claudio Poggi entregó los decretos de homologación a representantes de las firmas que sumarán personal directamente del Plan de Inclusión, quienes a su vez tendrán la oportunidad de ganar experiencia en situaciones de empleo genuino.
Este martes, en el mismo acto en el que el entregaron créditos del Consejo Federal de Inversiones (CFI) a PyMEs, el gobernador Claudio Poggi encabezó un acto ligado a la inserción laboral, en la que entregó decretos de homologación a directivos de empresas del sector privado que optaron por incorporar a su nómina a beneficiarios del Plan de Inclusión Social. En total, siete firmas sumaron este martes un total de 28 trabajadores a sus filas.
“Lo llamamos un subsidio directo al empleo, a ustedes como empresarios les alivia el costo del empleo y nosotros como Estado ayudamos a los trabajadores de Inclusión Social a aprender un oficio o rubro nuevo”, explicó el Gobernador. La iniciativa contempla entrevistas laborales para optimizar las posibilidades de encontrar perfiles que encajen con la labor correspondiente, a modo de poder sostenerlo en el tiempo.
El Mandatario explicó que en el convenio que establecen con las empresas, el Estado se hace cargo de abonar el 100% del salario del personal incorporado durante el primer año de trabajo en la empresa, de un 75% del mismo durante el primer semestre del segundo año y de un 50% en el segundo semestre. “La empresa se encarga de incluir la ART y la obra social”, detalló Poggi.
Si bien 9 de cada 10 beneficiarios se adapta satisfactoriamente a su nuevo entorno de trabajo, el Gobernador aseguró que la red de contención del Plan de Inclusión sigue abierto a todos aquellos que apuesten por las oportunidades en el mercado formal. “La experiencia que tenemos es que el 90% se queda en la empresa, pero si no se adaptan, encuentran o acostumbran, pueden volver”, aseguró.
En ese mismo sentido, el director de Inclusión Laboral, Daniel Spillman, explicó que mantienen comunicaciones mensuales con las empresas que sumaron personal de los planes sociales para hacer un seguimiento de cada situación. “El balance es muy positivo, estamos contentos, ellos también. Los están capacitando y velamos por cuidar esta fuente de trabajo, es muy poca la gente que regresó y eso nos marca que hay un fortalecimiento del empleo genuino”, remarcó el funcionario.
Spillman subrayó que no son solamente los beneficiarios de planes sociales quienes están conformes con la iniciativa, ya que lo ven como una oportunidad de progreso, sino también los dirigentes de empresas, quienes sienten un alivio económico a la hora de contratar mano de obra. “Es parte de una política pública de generación de empleo y acompañamiento al sector privado, en un contexto complicado”, destacó.
Para Lisandro Finelli, representante de JS Servicios Gastronómicos, no es la primera experiencia incorporando trabajadores del Plan de Inclusión. “Es el segundo que se suma, fue excelente lo que vivimos con el anterior. Es una gran idea porque además te permite elegir el perfil que te conviene o atrae y generalmente termina saliendo bien”, señaló el empresario, que explicó que la firma es propietaria de Big Jagger, el local ubicado frente a la Plaza Pringles.
“En nuestro caso, lo miramos con buenos ojos porque el Gobierno te financia una parte del sueldo del empleado por un plazo de dos años, lo cual te facilita todo el resto que, sin esto, es bastante caro. Entonces tenes a un empleado en blanco, en buenas condiciones laborales y esa persona también tiene la chance de progresar dentro del trabajo para, en un futuro, hacer su camino”, concluyó el dirigente.
