JUEGOS Y DEPORTES
La EDIRO continuará ‘Conectando con la neurodiversidad’ durante todas las vacaciones de invierno
La Estación de Interconexión Regional de Ómnibus propone dos semanas de cultura, juego e inclusión para toda la familia. De lunes a sábados desde las 15:00 hasta las 18:00.

Desde el 5 al 19 de julio, la Estación de Interconexión Regional de Ómnibus (EDIRO) se transforma en un centro cultural y recreativo, con propuestas gratuitas para que chicos y grandes vivan un receso invernal diferente.
De lunes a sábados, desde las 15:00 hasta las 18:00, se despliega una programación variada que combina entretenimiento, arte, talleres, cine y espacios de juego, ideados especialmente para niños de entre 3 y 13 años, con una gran impronta familiar.
La iniciativa, impulsada por la administración de EDIRO, busca consolidar a la terminal como un paseo cultural, comercial y afectivo, donde los jóvenes pueden disfrutar de los talleres o funciones cinematográficas mientras los adultos recorren los locales o degustan algún aperitivo en el patio gastronómico.

Uno de los ejes más significativos de esta edición el proyecto ‘EDIRO: Conectando con la Neurodiversidad’. Cada martes, bajo el lema “Mover, jugar y compartir”, las secretarías de Deporte y Personas con Discapacidad articulan charlas y actividades para concientizar y apoyar a las personas neurodiversas, especialmente a quienes poseen un espectro autista. Estas dinámicas son conducidas por profesionales que instauran un entorno cuidado, con recursos adaptados como pictogramas, sonido suave, aros, pelotas, vallas, sogas y más.
Con emoción y compromiso, Ornella Mascia —integrante del equipo de Deporte Adaptado de la secretaría de Deportes— compartió unas palabras: “Desde el primer momento en que la EDIRO nos convocó para sumarnos a esta propuesta, fue muy lindo poder proyectar y pensar cada actividad desde un enfoque inclusivo, respetuoso y amigable. Hoy, nos acompañan muchas instituciones, familias y profesores de escuelas deportivas en una propuesta pensada especialmente para personas neuro divergentes”.
“Hicimos juegos grupales, como volar un barrilete para trabajar nociones como el equilibrio, el centro, el arriba y el abajo. Además, llevamos a cabo circuitos sensoriales con pelotas y colchonetas, también juegos tradicionales como el sapo para que cada participante pueda elegir lo que más le gusta, en un entorno cuidado que promueva el encuentro, la calma y la conexión con el otro”, comentó.
Inés Antúnez, licenciada en Trabajo Social e integrante de la secretaría de Personas con Discapacidad, expresó: “Todas las actividades que hemos traído están relacionadas con los caballos y ese mundo, además de pinturas y talleres artísticos. Vamos a participar los dos martes dedicados a la neurodiversidad. La convocatoria es abierta a todo público. Si bien el martes es el día específico, eso no quiere decir que en otro momento no se pueda compartir, la idea es promover la inclusión y la convivencia entre todos”.
En adición, Antúnez destacó que la jornada contó con charlas a cargo de profesionales en psicomotricidad, que estuvieron enfocadas en el valor del juego. “Más allá de que nuestros niños tengan algún diagnóstico, no hay que olvidarse que, ante todo, son niños. El juego es un derecho para ellos, y también un derecho para los papás que están muy detrás de las terapias. No hay que olvidarse de jugar”, subrayó.
Para muchas familias, estos encuentros significan mucho más que una actividad recreativa: son espacios de contención, disfrute y pertenencia. Norma, una abuela orgullosa, contó: “Es la primera vez que vengo con mi nieto Salvador, que tiene 7 años. Hoy lo traje a él, y el viernes voy a traer a otros dos nietos porque me encantó la experiencia de compartir y jugar con ellos. Está todo muy lindo.”
