TRÁFICO ILEGAL
Un mono carayá encontrado en San Luis irá a un Centro de Rescate en Córdoba
La reserva ‘Proyecto Carayá’, de la provincia vecina, recibirá al ejemplar. Su traslado está previsto para este viernes 7 de marzo y se realizará vía terrestre. Le permitirá recuperarse e interactuar con otros de su especie.
Una ciudadana del barrio 544 viviendas de la ciudad de San Luis encontró un ejemplar de mono carayá en la medianera de su hogar y, al observar su vulnerabilidad, lo trasladó por sus propios medios hasta la comisaría. A través de la Policía Ambiental, dieron aviso al equipo veterinario del Centro de Conservación de Vida Silvestre ubicado en La Florida para que sea asistido.
El ejemplar juvenil de 1,6 kilo demostró una notable recuperación después de haber sido encontrado en un estado de salud preocupante. Aunque inicialmente no mostraba fuerza en su cola prensil, con el correr de los días logró recuperar la vitalidad suficiente como para volver a la normalidad.
El animal, que fue recibido por veterinarios locales, mostró una buena aceptación de su dieta, que incluye hojas y diversas frutas, lo más parecido a lo que consumiría en su hábitat natural. A pesar de su mejoría, su situación no está exenta de desafíos, ya que el mono está muy acostumbrado a la presencia humana, lo cual implica que deberá permanecer junto a sus pares en la reserva ecológica ‘Proyecto Carayá’, que será su nuevo hogar.
Debido a que el lugar donde fue encontrado no pertenece a su zona de distribución, el mono será trasladado el próximo viernes a este centro cordobés especializado. Allí, los expertos evaluarán si es posible rehabilitarlo y liberarlo en esa reserva o si, en cambio, quedará en cautiverio. En el caso de que se opte por mantenerlo bajo cuidado, las condiciones climáticas ideales y la compañía de otros monos serán clave para su bienestar, ya que los monos carayás son animales gregarios por naturaleza.
Ubicado en La Cumbre, provincia de Córdoba, el Proyecto Carayá es el primer y único centro de primates en Argentina. Es una ONG que hace más de 20 años desarrolla el programa de conservación ex-situ de la especie Argentina Alouatta Caraya (Mono Carayá).
Fundado por María Alejandra Juárez, y reconocido por el Instituto Jane Goodall y Proyecto Gran Simio (GAP), la organización rescata animales salvajes que han sido víctimas del tráfico ilegal, del mascotismo y la destrucción de sus hábitats naturales. Muchos de ellos han vivido situaciones muy traumáticas y llegan al santuario en condiciones alarmantes.
Los carayá, víctimas del mascotismo y el tráfico ilegal
Los monos son traídos ilegalmente para ser vendidos como mascotas. La crueldad de la captura incluye matar a la madre y a varios adultos del grupo familiar, que al ser animales muy sociales defienden a las crías entre todos. Otra de las crueldades que atraviesan los monos al ser capturados es ser manipulados con alcohol, con el fin de que se duerman para poder transportarlos con facilidad.
Generalmente, son desplazados escondidos en huecos del motor, atados o en recipientes muy pequeños. La mayoría de los monos capturados mueren durante el traslado, tanto por las condiciones en que se hace (espacio, temperatura y falta de alimento) como por el estrés y la depresión que les causa la separación de su madre y su grupo familiar.
El estrés, el trauma y el miedo suelen desencadenar comportamientos agresivos, por lo que es común que la gente los tenga atados o enjaulados. Por su apariencia, la gente que los tiene los trata como niños, colocándoles ropa y dándoles alimentos (golosinas, yogurt, chocolates, etc.) que no corresponden para nada con su dieta natural y que son muy perjudiciales para ellos, causándoles daño hepático, obesidad y hasta adicciones. Algunos de los monos que ingresaron al Centro de Conservación de Vida Silvestre (CCVS) eran tenidos como mascotas y otros estaban siendo transportados para su venta ilegal.
Estos animales permanecen el menor tiempo posible en el CCVS porque, considerando el carácter altamente social de la especie, sufren mucho la soledad y es habitual que desarrollen cuadros de depresión que pueden llevarlos a la muerte en poco tiempo.
Los monos carayá son los primates más australes del mundo. Se los conoce también como monos aulladores. Habitan en grupos, en áreas de bosque y montes del noreste argentino. Si bien aún no aparecen en las listas de especies amenazadas, tienen dos grandes problemas en nuestro país: la disminución de sus ambientes naturales, la tala indiscriminada de los montes y el avance de la frontera agrícola, especialmente del cultivo de soja, que provocan que diariamente el carayá, junto a otras especies, pierdan sus hábitats naturales. A nivel mundial, es una especie considerada difícil para mantenerla en cautiverio, dado a que no suelen sobrevivir los dos años como tampoco se adaptan ni se reproducen en zoológicos.
