PLAN DE INCLUSIÓN EDUCATIVA
Volver al aula: un camino que se transita de a dos
Por medio del PIE, Inés (64) y Omar (60) buscarán terminar la primaria y la secundaria, respectivamente. Oriundos de Catamarca y Jujuy, aseguran que San Luis ofrece oportunidades que no existen en otras provincias.
Ella es de Catamarca; él, de Jujuy, y juntos llegaron a la provincia de San Luis hace más de 13 años en busca de nuevas oportunidades. Hoy, con un entusiasmo y una voluntad que contagian, Inés Petrona Béliz (64) y Omar Leiva (60) iniciarán un nueva etapa de sus vidas con el Plan de Inclusión Educativa (PIE).
“A nuestra edad no había muchas oportunidades para terminar la escuela. El PIE cambió todo. A pesar de los años que tenemos, este Plan nos hace sentir más jóvenes”, cuenta entre risas Inés.
Ella hizo hasta cuarto grado y tuvo que abandonar porque en Joyango, el pueblito catamarqueño de donde es oriunda y, según cuenta, “el diablo perdió el poncho”, no había posibilidades de seguir estudiando. Él, en cambio, hizo toda la primaria pero no llegó a terminar el primer año de la secundaria. “Por tontera abandoné”, dice sin dar mayores precisiones.
En 2014, encontraron una nueva oportunidad con el PIE. “Nos enteramos por nuestra hija Verónica, quien es licenciada en Trabajo Social. Nos insistió tanto que fuimos a inscribirnos. Estamos muy contentos con la decisión que tomamos”, asegura Omar. Y añade: “San Luis ofrece oportunidades que no existen en otras provincias. Todo lo que se está haciendo por la educación es maravilloso”.
Unidos más que nunca, Inés y Omar saben que la vuelta a clases no será fácil. Tampoco incorporar a su rutina las nuevas tecnologías, con las que esperan amigarse con la ayuda de sus nietos. Pero, a pocas semanas del inicio de clases, son optimistas respecto a su futuro. “Hay muchas personas que se reciben de grandes; eso es una motivación para mí. Cuando termine la primaria y la secundaria me gustaría seguir alguna carrera universitaria”, confiesa Inés.
De Catamarca y Jujuy a la tierra de las oportunidades
Inés y Omar se conocieron hace más de 40 años en Jujuy. Ella había llegado allí junto a su familia detrás de nuevos horizontes. Juntos tuvieron cuatro hijos, quienes se fueron mudando uno a uno a la ciudad de Villa Mercedes. Allí lograron desarrollarse tanto en el plano personal como en el profesional. Sus padres siguieron este mismo camino en 2001.
Con toda la familia radicada en la provincia de San Luis, este matrimonio se prepara para transitar una nueva etapa de a dos. “Hacía tiempo que queríamos terminar la escuela. Ahora que estamos tranquilos y los hijos están grandes, podemos hacerlo”, confiesan.
Aun así, saben que seguirán cumpliendo el rol que más disfrutan: el de abuelos. “Nos gustaría ayudar a nuestros nietos con las tareas escolares; estar más presentes en su educación”, afirma Omar. Y concluye: “Son cosas que nos hacen muy bien”.
Nota y foto: Prensa Universidad de La Punta