Alerta nacional por dengue
Hissa: “La prevención es la medida más efectiva”
En las últimas semanas el dengue ha alcanzado niveles de epidemia en algunos países limítrofes, principalmente en Brasil y Paraguay, motivo por el cual en Argentina se han extremado los controles mediante un alerta de alcance nacional.
Si bien en todo el país no se han registrado durante el corriente año muertes ni casos graves, conforme a lo divulgado por el Sistema Nacional de Vigilancia de la Salud, las precauciones se han intensificado en cada jurisdicción a los fines de detectar con la mayor inmediatez todo cuadro sospechoso.
Sobre las medidas impuestas ante la amenaza que presenta la enfermedad, se consultó al ministro de Salud, Dr. Gastón Hissa, quien se refirió a la patología y detalló la labor que realiza el sistema sanitario provincial.
¿Qué es el dengue?
El dengue es un virus, de ahí su naturaleza endémica, y el agente transmisor es el Aedes Aegypti, un tipo de mosquito que oficia como vector de transmisión. Cuando el insecto pica a una persona que sufre de dengue se convierte en portador del virus, por lo que sus posteriores picaduras a otros humanos implica una alta probabilidad de que los contagie. Es importante recalcar que el Aedes Aegypti transmite la enfermedad solamente durante fases de circulación viral o si pica a quien previamente haya estado enferma.
¿Qué tipo de control se desarrolla en el ámbito sanluiseño ante el dengue?
En San Luis este monitoreo preventivo se impuso de modo inmediato en vísperas del aumento de temperatura, mediante una serie de recomendaciones y estableciendo como prioritaria la situación tanto en hospitales como en los centros de atención primaria de la salud (CAPS) distribuidos en todo el territorio provincial. Esta premisa se practica siempre antes del inicio de las temporadas estivales y coinciden con los lineamientos establecidos por el Plan Nacional de Prevención y Control de Dengue y la Fiebre Amarilla, estrategia que fuera consensuada en 2009 por los ministerios de Salud de todo el país.
¿Cómo se elimina el factor de transmisión?
La clave para evitar esta enfermedad es comprender que sin mosquito no hay dengue, por lo que desde la prevención resulta imprescindible eliminar al insecto en sus distintos estadios de crecimiento. Por eso es fundamental preservar la higiene del hogar, de puntos de trabajo y espacios públicos. Todos los recipientes que contienen agua clara y quieta, en el interior como en patios, jardines, balcones y terrazas, son potenciales criaderos para el mosquito.
Por lo general el mosquito se encuentra en la casa o alrededor de ella. También los sitios baldíos representan un riesgo importante, por lo que es necesario extremar el desmalezado, especialmente durante épocas de temperaturas elevadas. El mantenimiento de patios y jardines es primordial, como también que los desagües de lluvia estén destapados. Se debe prestar atención de que los huecos de los árboles no tengan agua, retirar cacharros, llantas y cualquier artículo en el que se almacene este vital elemento que, en tales condiciones, es peligroso. Es tan importante esto que hasta debe procurarse cambiar con frecuencia el agua de floreros y bebederos de animales.
¿Hay mosquitos todo el año?
Durante los meses de temperaturas bajas el mosquito adulto muere, pero sus huevos y larvas permanecen en los recipientes con agua clara y quieta. De hecho es importante tener en cuenta que fuera de temporada es necesario que las piscinas estén vacías o se las mantenga cloradas. Los criaderos de mosquitos no sólo deben eliminarse en verano, sino durante todo el año.
¿Qué recomendaciones han de tenerse en cuenta con respecto a los espacios públicos?
La prevención va de la mano con la responsabilidad, actitud que debemos tener no sólo para con nuestro hogar, sino también para con nuestro entorno. Los espacios públicos son de todos y son nuestros, por lo tanto debemos procurar no arrojar recipientes o residuos en los que puedan acumularse agua, como también identificar posibles criaderos y dar aviso a las autoridades municipales para que se tomen las medidas correspondientes.
¿Qué cuidados deben adoptar los viajeros?
Quienes se dispongan a viajar a lugares en los que haya una circulación viral del dengue deben extremar las precauciones, utilizando fundamentalmente repelentes sobre la ropa, la piel expuesta y en los domicilios. Si realizan actividades al aire libre es recomendable utilizar mangas y pantalones largos, y no dejar de consultar a los servicios médicos locales ante la menor sospecha.
¿De qué manera se manifiesta el dengue?
El principal síntoma es fiebre superior a los 38º sin signos de infección respiratoria, junto a dos o más de las siguientes molestias: cefalea, dolor detrás de los ojos, dolor de músculos y articulaciones, malestar general, erupciones rojizas en brazos y piernas, picazón, diarrea, nauseas, vómitos y sangrado de nariz y/o encías.
¿Cómo actuar ante la sospecha?
Debe consultarse de inmediato con el médico ante el menor indicio y evitar toda automedicación, como el consumo de ibuprofeno, aspirinas o inyecciones intramusculares para evitar hemorragias; especialmente las embarazadas. Si bien la gestación no es factor de riesgo para el dengue, la enfermedad puede producir complicaciones. Ante dolores intensos sólo puede tomarse paracetamol pero, insisto, nada es más recomendable que acudir al médico.
Es importante divulgar que si una mujer que esté amamantando sospecha que sufre dengue o efectivamente la padece, no debe suspender la lactancia, ya que la leche materna protege al bebé de la enfermedad. El único agente transmisor es el mosquito.
¿Es útil fumigar casas y espacios públicos?
Sólo si autoridades competentes lo determinan conveniente. Sucede que la aplicación de insecticidas sólo combate la población adulta de mosquitos, además, toda fumigación debe estar acompañada por la eliminación de recipientes que acumulen agua, tanto en espacios públicos como domiciliarios.
¿Algún otro factor que considera importante para tener en cuenta?
La prevención es la medida más efectiva para evitar el dengue, por lo que demanda el involucramiento de todos.
Nota y foto: Alfredo Salinas – Oficina Prensa Ministerio de Salud.
