“Conocer Francia es lo máximo; será un viaje inolvidable”
Así lo expresó Inti Gómez, ganador de la disciplina Ajedrez en las Olimpíadas Sanluiseñas del Conocimiento. Mañana viajará a Europa para disfrutar de su premio.
A 164 kilómetros de la Capital sanluiseña, en la localidad de Candelaria, Inti Gómez (17) descubrió las Olimpíadas Sanluiseñas del Conocimiento (OLSC) de la Universidad de La Punta (ULP), y a través de ellas demostró su talento en la disciplina de Ajedrez.
El joven participa desde 2006. El año pasado logró el segundo puesto y obtuvo el viaje a Francia, ya que la olímpica Elisa Altamirano, quien alcanzó el primer lugar tuvo la oportunidad de viajar al exterior en 2011. Junto con su mamá, Graciela Gómez, el joven compartió su historia, proyectos y opiniones con el equipo de Prensa de la ULP:
¿Cómo fueron tus primeros pasos en el ajedrez?
A los nueve años llegamos de Buenos Aires para acompañar a mi tío que estaba solo en Candelaria. Ahí empecé guitarra y canto, en la biblioteca. Un día, el profesor faltó y justo había un instructor de ajedrez que me ofreció jugar y, como algo sabía, porque me enseñó el marido de mi mamá a los siete años, me quedé. Hoy, el ajedrez forma parte de mi vida.
Con la Escuela de Talentos conocí muchas provincias como Córdoba, Entre Ríos, Rosario y Formosa, donde participé en los Intercolegiales. Terminamos en primer lugar junto a un gran equipo. Fue una alegría enorme lograr un título para San Luis.
Participás en las Olimpíadas desde el 2006, ¿cómo transcurrieron estos años de competencia en el juego ciencia?
La primera vez que competí logré el 3º puesto y eso me dio aliento para seguir. Siempre estuve en el podio entre el 2º y el 3º lugar. La competencia del año pasado fue muy dura. Elisa es mi compañera de escuela y contrincante, una gran jugadora que respeto mucho, reconozco que fue un desafío complicado.
Recuerdo que mientras se jugaban partidas de la etapa final, me acerqué a las tablas de posiciones, hice cálculos y me di cuenta que había ganado, empecé a saltar para todos lados, no lo podía creer. Me queda este año para participar, sé que van a participar muchos en la competencia, pero creo poder lograr el primer puesto.
¿Qué expectativas tenés en cuanto al viaje?
Conocer Francia es lo máximo, es un gran logro, será un viaje inolvidable. Estuve viendo el itinerario y poder conocer el Palacio de Versalles me encantó. Francia, en imágenes, es hermoso, vivirlo personalmente será lo mejor.
Si bien te queda un año en el secundario, ¿pensás seguir una carrera universitaria?
Me interesa la Psicología, me ha pasado de tener que estudiar rivales nacionales con los que he competido, estudiar cómo juegan, qué clase de ataque tienen, cómo se defienden, eso tiene mucho de psicología. Descubrís formas de actuar, ataques que uno no conoce. Olimpíadas te abre muchas puertas para el conocimiento, creo que influye a la hora de elegir una carrera universitaria.
Graciela, ¿cómo apoyó a Inti en su participación en las Olimpíadas?
En la última instancia de competencia no quería presentarse porque tuvimos un problema en casa, le dije que tenía que ir porque iba a ganar y le di unos escarpines de mi nieta de dos años para que le dieran suerte.
Lo esperé todo el día, salía a la calle, entraba y salía de nuevo. Cerca de las cuatro de la tarde venía Inti caminando con el cartel de Olimpíadas: corrí, lo abracé y lloramos juntos. Fue una emoción muy grande porque se lo merece, nunca se llevó una materia, es muy buen compañero, no toma, no fuma, sale de vez en cuando, es muy buen hijo, lo amo demasiado. Se merece el viaje, son oportunidades que se presentan una sola vez en la vida, sé que la va a pasar bien.
¿Qué piensa de las Olimpíadas?
Les da a los chicos entusiasmo de estudiar y competir y, al mismo tiempo, divertirse. Y no solo compiten con su contrincante, sino que también lo hacen con ellos mismos, porque quieren conseguir el primer puesto, entonces ellos mismos se exigen. Uno como padre no tiene que exigirles, sino acompañarlos. Además, tienen que entender que aparte de ser una competencia es un juego.
Es un ambiente sano que saca a los chicos de la calle. Ellos necesitan el apoyo que el Gobierno les da para salir adelante, y la Universidad no solo premia el primer lugar, sino que reconoce el esfuerzo de los diez primeros lugares. Así obtengan una medalla, para los chicos es importante.
