Dios está en todas partes… pero los “Santos”… en Merlo

Los tablones del “Viejo Gasómetro” de Avenida La Plata, fueron a parar a una Iglesia en la Villa de Merlo, en el año que “El Ciclón” gritaba campeón en Rosario. De milagros o coincidencias, habla esta nota que vale la pena leer.

De la Iglesia de Merlo al “Viejo Gasómetro, pasando por el padre Lorenzo Massa y el Papa Francisco.

En el año 1995, San Lorenzo de Almagro se coronaba campeón del Torneo Clausura, de la mano de Héctor “Bambino” Veira como entrenador. El campeonato fue obra de ”un milagro”: ganaba de visitante a Rosario Central 1-0 mientras que Gimnasia y Esgrima de La Plata, puntero con dos unidades de ventaja sobre su escolta, caía de local frente a Independiente, por idéntico marcador.

Era el único resultado posible que privaría a los “triperos” de su primer título. Una quimera, un imposible para San Lorenzo, y sin embargo, se dio. Por un tiempo se ganó el mote de “San Lorenzo de los Milagros”.

Otra “obra divina” sucedía ese mismo año en la Villa de Merlo. Comenzaba la construcción de la capilla conocida como Templo Nuevo, a una cuadra de la plaza. Hoy, la más imponente de la ciudad.

El “Viejo Gasómetro” de Avenida La Plata.

Estos hechos tienen una conexión eclesiástica-futbolística, ya que el techo de la Iglesia contiene en su estructura, los tablones que alguna vez, formaron parte del “Viejo Gasómetro” de Avenida La Plata, el primer estadio del “Ciclón” de Boedo. Un guiño de Dios hacia la institución que se mudó al Bajo Flores: lo que el hombre pisó sobre la tierra en campo “Santo”, está arriba, más cerca del cielo.

Cuentan en Merlo que muchos feligreses rezan “mirando el techo”, para una comunión perfecta entre lo terrenal y lo celestial. Lo que no se sabe, si todos los que alzan la vista son hinchas de San Lorenzo.

El templo merlino tiene una gigantografía del Papa Francisco en una de sus fachadas. Conocido es el amor que tiene el sumo pontífice argentino, al club fundado por Lorenzo Massa, un cura salesiano. Desde el vamos, hubo relación con el mundo espiritual.

A los 95 días del pontificado del Papa Francisco, “El Diablo” se va a la “B” derrotado por “El Santo”.

Jorge Bergoglio se convirtió en jefe de la Iglesia Católica en el 2013, año de la obtención del 12° título en la era profesional de San Lorenzo de Almagro. ¿Otro gesto del Señor hacia sus fieles de la divisa azulgrana?

Recordemos: “Los Cuervos” llegaron a la última fecha del Torneo Inicial, peleando junto a Vélez, Lanús y Newell´s Old Boys. El equipo de Juan Antonio Pizzi (32 puntos) enfrentaba a Vélez (30) en Liniers. En el Parque de la Independencia, Ñuls (30) y Lanús (30) jugaban entre sí.

San Lorenzo, ganando se consagraba. Era una parada difícil. Había “olor a desempate” para definir al campeón. Los rosarinos estuvieron dos veces arriba del marcador mientras que en el Amalfitani, el cero no se quebraba. Lanús terminó empatando y con “nada” por jugar entre Vélez y San Lorenzo, llegó esta jugada:

http://www.ole.com.ar/futbol-primera/Torrico-atajada-campeonato_3_1048125212.html

Se habló de la atajada de Sebastián Torrico y que valió un campeonato. Los más creyentes adujeron una intervención “del más allá”, vaya uno a saber.

Para completar un 2013 lleno de advenimientos y causalidades, el 15 de junio el “Santo” manda al mismísimo infierno al “Diablo”. Otra sacra contienda que se resolvió a favor del “bien”, esta vez, en un campo de juego. Independiente a la “B” Nacional.

No hay dudas para mí: San Lorenzo tiene influencias que la razón humana no alcanza a comprender. Por lo menos cuanto a las artes del balonpié se refiere.

Lo cierto es que la comunidad católica de San Lorenzo de Almagro, tiene en San Luis, un templo donde direccionar sus ruegos, movidos por la fe, con la intercesión (de ser necesario) del mismísimo Santo Padre, si esas plegarias tienen que ver con pasiones deportivas. De esta forma, el firmamento oirá las oraciones tan fuerte como si aquellas gargantas llevaran destino de gol en sus pedidos más urgentes.