EN SAN LUIS SE PUEDE
El clásico que fue verde y blanco
Estudiantes le ganó 1 a 0 a Juventud y desató la pasión de su gente. Pero afuera del campo, la fiesta fue de las hinchadas. Mirá las imágenes del aliento para los dos clubes puntanos.
El mensaje había sido claro: “Un incidente y el próximo partido se juega a puertas cerradas”. La policía realizó un operativo que involucró a 250 efectivos y que los hinchas respetaron hasta que se fueron a casa. Adentro, calentaron el ambiente, hicieron temblar el cemento, se desahogaron y lo vivieron como nunca antes. Los del Coliseo y los del Bajo estuvieron frente a frente, disputando quién cantaba más fuerte y quién llevaba el mayor cotillón. Fueron los dueños del color y del folclore puro que sólo genera el fútbol, como en cualquier parte del mundo.
Todos escribieron una página más en la historia del deporte y le demostraron al país, donde la violencia en el fútbol genera debates y preocupación, que en San Luis sí se pudo.
La evacuación fue rápida y en la calle no hubo roces. Tal como se había planificado, los puñados más grandes de hinchas volvieron a San Luis por los caminos que habían tomado a primera hora de la tarde. Sólo se cruzaron los que vivían en La Punta y allí dieron el mayor ejemplo; porque por el mismo sendero caminaron con sus camisetas puestas, casi juntos, los del Verde y los del Juve. La fiesta y las pasiones quedaron en el estadio, el mejor sitio para tener una cita futbolera, en un domingo especial para el deporte de San Luis y en una ciudad que puso a la Argentina en lo más alto del deporte internacional.
Nota: Catalina Ysaguirre.
Fotos: Marcelo Lacerda.