El Laboratorio del Campo recibió a estudiantes universitarios que aspiran a ser veterinarios

Alumnos que transitan el último año de la carrera de Veterinaria en la Universidad Católica de Cuyo, visitaron las instalaciones del organismo presidido por el Ministerio de Producción, donde aprovecharon para visualizar y poner en práctica conocimientos teóricos que adquirieron a lo largo del año.

El Laboratorio del Campo abrió sus puertas en el predio de Sol Puntano para recibir a estudiantes del último año de la carrera de Veterinaria de la UCCuyo. Allí las directoras del Laboratorio, Micaela Álvarez y Agustina Ferreyra, brindaron una serie de charlas informativas y orientaron a los alumnos en torno a las diferentes técnicas diagnósticas que practican.

El encuentro forma parte de un convenio que tienen el Ministerio de Producción y la Facultad de Medicina Veterinaria. Fabián Cantisani, médico veterinario y profesor de la UCCuyo, agradeció la predisposición del personal del Laboratorio y aseguró que la iniciativa es “un beneficio pedagógico para los alumnos y un cierre muy valioso para fijar conceptos”.

Micaela Álvarez, quién ejerce como médica veterinaria y está a cargo del Laboratorio del Campo, señaló que “uno de los objetivos de la visita fue mostrar a los estudiantes la rutina de un veterinario de laboratorio como uno de los posibles futuros campos a considerar para ejercer la profesión”.

Los estudiantes mostraron un gran entusiasmo ante la posibilidad de visualizar e incluso aplicar algunas de las técnicas que, hasta ese momento, solo habían leído en textos académicos. Lucila Garro, una de las alumnas que integró la visita, lo resumió de la siguiente manera: “Nos explicaron metodologías de trabajo y la importancia de sus procedimientos, permitiéndonos aprender e incluso formar parte de las prácticas. Para nosotros es muy enriquecedor, nos ayuda a comprender mejor la teoría que se nos brindó en la cursada para poder cerrar algunos conceptos”.

Durante la jornada, los estudiantes tuvieron la oportunidad de observar la práctica diaria de un laboratorio en la detección de diversas enfermedades infecciosas que repercuten en la producción animal y, por consiguiente, en la salud de los consumidores.

La profesora Valeria Gerbaudo acompañó a la delegación y describió la jornada como una “experiencia inolvidable”, destacando que “los alumnos quedaron encantados con la explicación de las veterinarias y las diferentes técnicas que les permitieron realizar”.