TESTIMONIO
“Pudo haber sido en Las Mil, en Unión o en la Ex Lanín, pero Dios quiso que sea acá”
Vanesa Marinotti y su familia llamaron la atención en la entrega de viviendas por sus remeras unificadas, con una leyenda de la Biblia que dice que “todo tiene su tiempo”. Esperaron 14 años y finalmente su tiempo llegó.
Vanesa Marinotti hizo un breve repaso de los momentos vividos en los últimos 14 años, desde que se anotó para recibir una casa en la primera gobernación de Claudio Poggi hasta este presente feliz, con la llave en la mano: “Lo hemos esperado un montón, hemos vivido todos los sentimientos juntos, frustraciones, desolación. Todo lo que puede pasar en 14 años de no tener respuestas y bueno, hoy llegó el gran día porque gracias a Dios, el señor Gobernador cumplió con su palabra. Así que bueno, felices, contentos”.
Toda la familia de Vanesa lució unas remeras muy especiales. “Nosotros somos hijos de Dios, cristianos, conocemos mucho de la palabra y había estado todo este tiempo buscando algo para que pudiéramos dar un mensaje. Y la verdad que fue éste, que es un versículo bíblico donde dice que todo tiene su tiempo, todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora. Nos podrían haber entregado en muchas oportunidades donde se entregaron las viviendas, en Las Mil, acá en el Barrio Unión, allá en la Ex Lanín. Pero por ahí considero de que hubiésemos estado muy lejos de la familia, hubiésemos tenido otra clase de vecino y Dios ha encontrado la forma de que sea este el tiempo, en este lugar. Cerca de la familia, cerca de la escuela de las chicas, cerca de la iglesia donde vamos, así que por eso es el mensaje este que nos hemos puesto en la remera”.
La flamante propietaria contó que lleva “18 años de matrimonio, desde el primer momento alquilamos y hasta el día de hoy alquilamos, entre medio nacieron ellas, así que fue, no sé cómo decirlo, desolación. Es como que por ahí no teníamos respuesta, cuando hemos viajado a San Luis, el gobierno anterior nos borró todas las cuentas, no teníamos respuesta de nada, es como que no hubiese existido toda la primera etapa de la inscripción”.
Cree que “la casa propia es importante para una familia, pero cada uno lo vive de manera distinta. Es importante obviamente, pero cada uno le da importancia por una cuestión personal, dependiendo de su historia. La vivienda te da una base en la familia, los cimientos donde vivir. Es difícil acceder a una vivienda, es difícil alquilar, es difícil para el que por ahí no tiene los ingresos para comprarse una casa propia. Esta es una oportunidad de poder tener tu casa de a poquito y pagando las cuotas y es una facilidad, la verdad que sí”.
Bromea con sus hijas porque reconoce que “nos ganaron la pieza las chiquitas, ya eligieron, así que no nos quedó otra. Y ahora a la tarde, ya ahora vamos a relajarnos un poco ahí adentro, vamos a tomar un mate, vamos a limpiar un poquito y ya a la tarde tenemos un poco organizado para empezar a traer. La noche la pasamos acá”.
