POLÍTICA HABITACIONAL
En Villa Mercedes, 96 familias más comenzaron a disfrutar la casa propia
El gobernador Claudio Poggi encabezó el emotivo acto en el nuevo barrio que nació en la ciudad, justo sobre la ruta provincial 2B. Con las lágrimas como denominador común, cada vecino recibió su llave e ingresó a su hogar, por primera vez como adjudicatario.
La ciudad de Villa Mercedes concretó una nueva entrega de viviendas en el marco del programa habitacional de terminalidad de los planes ‘Progreso’ y ‘Sueños’, una política pública orientada a garantizar el acceso a la casa propia y a acompañar a las familias en la finalización de su proyecto habitacional.
La actividad se desarrolló en el barrio ubicado sobre la ruta provincial 2B, donde se entregaron 96 carpetas completas con decretos, contratos, formularios de reclamo y las llaves correspondientes a cada familia, permitiendo que ingresen formalmente a su vivienda.
El acto contó con la presencia del gobernador Claudio Poggi, quien acompañó la jornada junto al intendente de Villa Mercedes, Maximiliano Frontera, y autoridades provinciales vinculadas a las áreas de política habitacional, escrituración, administración de viviendas, soluciones habitacionales y regularización dominial.
Tras su discurso, el Mandatario compartió con el público un mensaje privado que le envió en la semana otra vecina que había sido adjudicada. En su relato, la mujer le da las gracias a Poggi y recuerda que ella mantuvo cierta desconfianza en acceder a la casa propia, producto de su decepción con otros políticos en el pasado.
“Ahí aparece la figura de mi mamá. Fue ella quien me acompañó a inscribirme en 2011 y también la que pagó 70 cuotas con una ilusión que la superaba. Me decía ‘la casita para vos y tu hijo se va a dar'”, contaba la vecina en el mensaje. Cuando finalizó el mandato de Poggi y reinó la desilusión y desesperanza, también fue la figura de su madre quien la mantenía de cierta manera a flote.
“Había terminado el sueño para mí, pero ella decía ‘cuando vuelva Claudio va a cumplir, solo tenés que mirarlo a los ojos, es un tipo sincero'”, recordó. “Mi mamá murió hace 4 años, con 63 años. Nadie lo esperaba, se fue de un día para el otro. Vos volviste y cumpliste, se que en algún lugar ella lo vio mientras me decía ‘hija, yo te lo dije’. Hoy lloro de emoción porque tengo la casa y de tristeza porque no puedo abrazarla, pero le doy gracias en su nombre”, agrega el escrito.
“Se llamaba Susana, siempre apostó y creyó en vos. Yo no, pero me enseñó que siguen existiendo políticos de palabra”, concluye el mensaje.
Así, la intensa lluvia que azotó a la provincia cesó en algún momento de la madrugada, pero el agua siguió corriendo por las mejillas de las 96 familias que cumplieron esta mañana su sueño. En cada una de esas pequeñas gotas, en cada expresión, en cada abrazo, en cada cartel, en cada llave.
En todo eso se resume un proceso que se hizo más largo de la cuenta y un camino que debió soportar los incesantes golpes al hígado de la frustración, la desilusión y la desesperanza. Ahí también se sintetiza un corazón que supo aguantar y latir más fuerte que nunca cuando no tenía de qué agarrarse y que hoy finalmente se dejó entregar a la emoción.
La ceremonia marcó el cumplimiento de la palabra empeñada con 1.430 familias de las 1.500 que constituyen el plan de terminalidad de estos planes habitacionales. Forma parte de una estrategia integral que no solo contempla la construcción y finalización de viviendas, sino también el acompañamiento administrativo y legal necesario para brindar previsibilidad, seguridad jurídica y tranquilidad a las familias adjudicatarias.
Olga Díaz sentía que, a su edad, el sueño de la casa propia ya era cosa del pasado. “Hoy lo pongo como uno de los mejores días de mi vida, pagar un alquiler es un sacrificio muy grande, a esta altura de mi vida tener la casa no tiene precio”, sintetizó. “Yo perdí las esperanzas, había pagado con mucho sacrificio y se nos vino todo abajo”, recordó con angustia, aunque ahora mira con esperanza el futuro: “El 2026 lo recibo en mi casita”, concluyó.
Silvia Páez es docente jubilada en Villa Mercedes y, al igual que muchos, toma la casa propia como uno de los logros más importantes de su vida. “Uno debía bajar los brazos pero no quería matar la ilusión y hoy llegó la recompensa”, señaló. Por ese motivo, dice, el agradecimiento al Gobernador será eterno. “Ha generado una felicidad inquebrantable, es algo que no vamos a olvidar jamás. Sabemos que las decisiones políticas pueden caer en las manos equivocadas, pero esta vez cayó en buenas manos y vale la pena agradecerle”, sentenció.
Con esta nueva etapa, los planes ‘Progreso’ y ‘Sueños’ reafirma su objetivo de consolidar barrios, fortalecer el entramado social y promover igualdad de oportunidades, entendiendo a la vivienda como un derecho y como la base sobre la cual se construye el proyecto de vida familiar.
Cada ingreso a una casa propia representa el cierre de una etapa de espera y el comienzo de una nueva historia, marcada por la estabilidad, el arraigo y la posibilidad de proyectar futuro en la comunidad.
