SALUD
Entregaron otras 65 computadoras en centros de salud del norte y oeste provincial
Con esta entrega, ya son 928 los equipos otorgados en centros de salud y hospitales para digitalizar la salud y fortalecer todas las zonas sanitarias de la provincia.
En una nueva etapa de fortalecimiento tecnológico, este jueves, el ministerio de Salud entregó 65 computadoras a centros de salud y hospitales de las Zonas Sanitarias I y II, destinadas a profundizar la implementación de la Historia Clínica Digital y los Registros Médicos en el sistema público provincial.
Los equipos fueron distribuidos entre:
- CAPS Balde de Escudero.
- CAPS Banda Este.
- CAPS El Cadillo.
- CAPS El Caldén.
- CAPS El Retamo.
- CAPS Talita.
- CAPS La Calera.
- CAPS La Majada.
- CAPS Leandro N. Alem.
- CAPS Los Manantiales.
- CAPS Nogolí.
- CAPS Pozo del Tala.
- CAPS Río Juan Gómez.
- CAPS San Gerónimo.
- CAPS San Miguel.
- CAPS Toro Negro.
- CAPS Villa de la Quebrada.
- Hospital de Candelaria.
- Hospital de Quines.
- Hospital de Luján.
- Hospital de San Francisco.
En total, el parque tecnológico del ministerio de Salud ya alcanza las 928 computadoras instaladas.
La incorporación de estos equipos permite que los establecimientos trabajen con información clínica actualizada, ordenada y disponible en tiempo real, lo que reduce tiempos de espera, evita errores, agiliza la atención y mejora la coordinación entre profesionales. La digitalización transforma procesos que durante años dependieron del papel, del traslado de carpetas o de la memoria institucional, y los reemplaza por un soporte seguro, trazable y de acceso inmediato.
Con esta infraestructura, cada consulta, diagnóstico, estudios o medicación queda registrado, lo que garantiza continuidad en el cuidado, especialmente para pacientes con enfermedades crónicas, embarazadas, niños, adultos mayores y personas que se atienden en distintos puntos de la provincia.
Al mismo tiempo, los Registros Médicos digitalizados permiten una gestión sanitaria más precisa, con datos que ayudan a planificar recursos, identificar necesidades, evaluar coberturas, mejorar circuitos de atención y anticipar respuestas ante situaciones críticas. La calidad del registro se convierte en una herramienta estratégica para tomar decisiones basadas en evidencia y sostener políticas públicas más eficientes.
