CONEXIÓN SAN LUIS
Reserva Aguas Buenas, un sinfín de cascadas, historias, piedras y colores
Esta reserva ubicada en Villa Larca combina paisajes de piedra y agua, senderos accesibles y restos de una historia minera que aún se lee en sus piedras. Más que una postal, Aguas Buenas ofrece un circuito ideal para el turismo de naturaleza y el turismo activo, con alto potencial para quienes buscan experiencias fuera de las rutas masivas.

El lugar toma su nombre de los manantiales y arroyos que alimentan los pozos y saltos interiores de la reserva, aguas que tradicionalmente se consideraron ‘buenas’ por su claridad y abundancia. En torno a esos cursos de agua se formaron senderos, lavaderos y antiguas explotaciones a cielo abierto. Con el paso del tiempo la actividad minera dejó huellas visibles (túneles y canteras en desuso) que hoy son parte del patrimonio paisajístico e histórico del área.
Aguas Buenas es especialmente valorada por sus cascadas y ‘lavaderos’ naturales: pequeñas piscinas, saltos y formaciones entre las piedras, donde el agua forma remansos aptos para el baño.
La diversidad de piedras de colores y la presencia de flora autóctona convierten a la zona en un laboratorio natural para geólogos aficionados y amantes de la fotografía. Esa combinación de valores naturales y geológicos la vuelve relevante tanto para la conservación como para la oferta turística regional.

El acceso se realiza desde la ruta provincial 1 (cercanías a Villa Larca). Desde la ruta hay caminos de tierra que unen la reserva con la ruta 1, el trayecto suele ser de varios kilómetros por huella, en tanto que el sendero principal conduce a puntos destacados como Saltos Las Guindas, Lavadero Chico y Lavadero Grande. Grupos de trekking y clubes locales publican recorridos y referencias prácticas para visitantes, y existen sectores habilitados para pasar el día, acampar y usar asadores (con servicios básicos).
La Reserva Aguas Buenas tiene atributos que la hacen ideal para varios tipos de visitantes.
Turismo de naturaleza: observación de aves, fotografía, baños estacionales en pozas naturales.
Senderismo y trekking: caminos de diversa dificultad que conectan cascadas y miradores.
Turismo científico y educativo: interpretación geológica por las rocas y restos mineros.
Turismo rural y experiencias locales: alojamiento en cabañas cercanas y recorridos guiados por emprendimientos de la zona.

Se recomienda a los visitantes acudir a guías habilitados para una mejor experiencia.
Consultar previamente la condición del camino y la disponibilidad de acceso (hay registros de control de ingreso).
Llevar calzado de trekking, agua, protección solar y bolsa para residuos.
Evitar bañarse en épocas de lluvias intensas o cuando haya correntadas.
Contactar a guías, organizaciones o a la administración local para rutas guiadas seguras.
La reserva Aguas Buenas es una joya regional que mezcla cascadas, senderos y un pasado marcado por la explotación minera. Su valor paisajístico y su accesibilidad invitan a una conexión más íntima con la naturaleza, Aguas Buenas ofrece motivos sobrados para explorarla.
