UNIVERSIDAD DE LA PUNTA
Jóvenes de todas las edades participaron del torneo de Desarrollo de Videojuegos
Este fin de semana, el Instituto de Comunicación y Arte de la ULP realizó el primer Hackathon ‘Desarrollando el futuro del Videojuego’, una iniciativa en la que los participantes programaron, diseñaron y dejaron volar su creatividad para crear un videojuego en tiempo récord.

El evento reunió a estudiantes de las carreras de Diseño Digital y Videojuegos y Desarrollo de Software del Instituto de Ciencia y Tecnología de la ULP, además de exalumnos y entusiastas de la programación. Durante 72 horas, los asistentes desarrollaron escenarios virtuales que abarcaron desde educación vial hasta ambientaciones del Lejano Oeste, demostrando un notable dominio de tecnologías programables, creatividad y conocimientos técnicos.
“Sabemos que es un concurso pensado para mayores de 18 años, pero aceptamos la participación de jóvenes más chicos, porque esta disciplina que ofrece nuestro Instituto, el mundo de los videojuegos, es un paradigma que sigue creciendo”, expresó Lucas Gontero, director del Instituto de Comunicación y Arte. Además, destacó que en Argentina solo existen cuatro lugares donde se estudia Videojuegos y uno de ellos es la Universidad de La Punta, y de manera gratuita.

A la hora de evaluar, el jurado consideró tres criterios principales: jugabilidad y control, idea y originalidad, y el impacto social del proyecto. Los participantes trabajaron con motores como Unity y Godot.
Una de las participaciones más destacadas fue la de Nicolás Sosa Montiveros, de apenas 10 años, quien obtuvo el tercer puesto. Alumno de la Escuela Pública ‘Progreso’ y ‘Sueños’, Nicolás se enteró del torneo gracias a su mamá y desarrolló por su cuenta el diseño y la programación del prototipo con el que compitió. Sus docentes resaltaron su curiosidad y talento, y alentaron a su familia a seguir apoyando su interés por la informática.

Otro caso inspirador fue el de Máximo Facundo Ruíz, estudiante de la Escuela Técnica ‘Martín Miguel de Güemes’, quien con 14 años alcanzó el segundo lugar junto a su equipo. Motivado por su profesor de Informática, Máximo continúa desarrollando un videojuego en Python, un sueño que persigue desde los 7 años, con el acompañamiento permanente de su mamá.
La única representante femenina, Juliana Giva, estudiante de segundo año de la Tecnicatura en Diseño Digital y Videojuegos, compartió su experiencia: “Es la primera vez que participo en una Hackathon. Me pareció muy interesante poder hacer networking, conocer personas con más experiencia. Participar en estos eventos suma muchísimo; es una gran experiencia”.

Por su parte, Diego Mortenssen, integrante del equipo que obtuvo el primer puesto, señaló: “Esta experiencia nos permitió aplicar metodologías ágiles. Mientras desarrollábamos el juego, todos los integrantes del equipo pudieron aportar códigos, ideas y mejoras. Fue un excelente trabajo en conjunto”.
“Los tres equipos ganadores recibieron trofeos con forma de Pac-Man, un emblema del mundo gamer, diplomas de participación, además de teclados, mouse y auriculares gamers”, concluyó Gontero.
