TURISMO Y CULTURA
El legado de José Santos Ortiz, presente en la identidad de San Luis
En el 241° aniversario de su natalicio, autoridades provinciales, historiadores y familiares se reunieron en Renca para homenajear el compromiso con la justicia, la educación y el federalismo del estadista sanluiseño.

El Gobierno de San Luis, a través del ministerio de Turismo y Cultura, junto con la municipalidad de Renca, la Junta de Historia de la Provincia y el Instituto Sanmartiniano – Filial Perú, llevó adelante una Jornada de Homenaje por el 241° aniversario del natalicio de José Santos Ortiz, uno de los más destacados estadistas sanluiseños y figura esencial del federalismo argentino.
El encuentro comenzó frente a la Casa de los Gobernadores, en Renca, donde, bajo la lluvia, se realizó el izamiento de las banderas nacional, provincial y de alfabetización, símbolos de soberanía, identidad y conocimiento. A continuación, se entonó el Himno Nacional Argentino y la intendenta de la localidad, Romina Peralta, dirigió unas palabras en honor a la memoria y al legado de José Santos Ortiz.

Posteriormente, las autoridades y el público se trasladaron a la Casa Histórica Provincial ‘Gobernador José Santos Ortiz’, donde se descubrió la cartelería identificatoria que incorpora este sitio al Pasaporte Nacional Sanmartiniano – Caminos de la Libertad, programa federal que reconoce los lugares donde el General José de San Martín y sus colaboradores dejaron su huella en el camino hacia la independencia de Argentina, Chile y Perú.
En el salón principal, el historiador Raúl Fourcade, presidente de la Junta de Historia de la Provincia, ofreció la exposición ‘José Santos Ortiz en el pensamiento de Juan W. Gez, Urbano Núñez y Cruz Ortiz’, repasando las visiones de tres grandes estudiosos sobre esta figura esencial del federalismo.

Luego, el rector de la Universidad de Villa Mercedes (UNViMe), Marcelo Sosa, presentó su conferencia ‘José Santos Ortiz y Facundo Quiroga, el trágico final de Barranca Yaco’. A continuación, el escribano de Gobierno, Juan José Laborda Ibarra, desarrolló la ponencia ‘Qué hubiera pasado si no hubiera sucedido Barranca Yaco’, una interesante propuesta de historia contrafáctica.
Más tarde, el exembajador argentino Juan Eduardo Fleming abordó la relación de la familia Ortiz con las Islas Malvinas, un vínculo poco conocido pero de gran valor histórico.

Debido a las condiciones climáticas, no se pudo realizar el recorrido histórico guiado previsto junto al profesor Miguel Bianchi, representante del Instituto Sanmartiniano del Perú – Filial San Luis, quien igualmente explicó los lugares recorridos por José Santos Ortiz en su tiempo. Posteriormente, se llevó a cabo el descubrimiento del busto y la colocación de ofrendas florales en homenaje al prócer.
Durante el acto, el periodista Rubén Ávila compartió con los presentes el proceso de repatriación de los restos de José Santos Ortiz, destacando la importancia de este acontecimiento para la memoria histórica de San Luis.
Tras un breve receso, se desarrolló un conversatorio coordinado por el historiador Guillermo Genini, cuya apertura estuvo a cargo de Santiago Lynch y Ortiz, quien evocó la figura de su ancestro, el primer teniente gobernador de San Luis, José Lucas Ortiz.

Lazos emblemáticos
Ortiz fue un hacendado, militar y destacado político nacido en Renca el 1º de noviembre de 1784. Su vida, marcada por el diálogo institucional y el compromiso con la Patria, culminó trágicamente en Barranca Yaco, el 16 de febrero de 1835, junto con Facundo Quiroga.
En febrero de este año, el Gobierno provincial participó en un emotivo acto conmemorativo en Córdoba. Las autoridades se trasladaron hasta el paraje de Barranca Yaco, a poco más de diez kilómetros de Sinsacate, donde Quiroga y Ortiz fueron emboscados y asesinados. Tras aquella tragedia, los restos del ‘Tigre de los Llanos’ fueron trasladados a Sinsacate y velados en la capilla de La Posta, una construcción de adobe con pisos de ladrillo, techo de algarrobo y tejas de caña. En cambio, los restos de Ortiz y de su esposa, Juana Inés Vélez Sarsfield, permanecieron durante décadas en Mendoza, hasta su restitución definitiva a Renca en 2010.





