VILLA MERCEDES
El Día del Niño se celebró en el Centro de Equinoterapia y en la Calle Angosta con juegos y arte
Con música, actividades con caballos y estaciones creativas, el Centro de Equinoterapia se vistió de fiesta para homenajear a los más pequeños. Los alumnos, familias y talleristas pasaron una tarde especial.

El Centro de Equinoterapia de La Pedrera se llenó de risas, música y alegría para celebrar el Día del Niño junto a los pequeños que asisten habitualmente al centro y sus familias, los alumnos de los ‘Talleres 2025’ y los chicos y familias de la salita de 5 años de la EPA N°10. Anticipándose a la jornada festiva, el jueves 14, desde las 14:00 hasta las 17:00, el lugar se transformó en un gran patio de juegos, donde cada rincón invitaba a disfrutar y compartir.
La jornada comenzó con las palabras de bienvenida de Valeria Piffaretti, quien destacó la importancia de estos encuentros para fortalecer vínculos y brindar a los niños un espacio de diversión e inclusión. Afuera, en la galería y el patio, mesas y sillas esperaban listas, mientras los más chicos corrían a las estaciones preparadas especialmente para ellos.
Los juegos fueron variados e incluyeron el tradicional ‘Poner la cola al caballo’, un Tetetí con zanahorias y caballos, el clásico juego de las sillas y un sector para maquillarse y sacarse fotos. No faltaron las actividades de movimiento: el ‘Baile agachadito’, ‘El Cocodrilo Dante’, ‘El Pollito Lalo’ y desafíos para caminar hacia atrás o imitar divertidas imágenes al sentarse en las sillas.
Uno de los momentos más disfrutados fue la ‘pesca’ de pelotas en una pileta. También hubo una estación para simular con caballo de madera las tareas de vestir, acicalar y cepillar para acercar a los niños al mundo de la equinoterapia.
Los padres, que al principio intentaban combatir el frío, pronto se sumaron al baile y a las actividades, compartiendo la alegría con sus hijos. Funcionarios de la secretaría de Personas con Discapacidad estuvieron presentes, demostrando el compromiso de la institución con cada niño y su familia.
Para cerrar la tarde, se repartieron paquetes de pochoclos para compartir en casa, y todos disfrutaron de torta y bizcochuelo. Además, hubo un espacio creativo donde los chicos prepararon masas de distintos colores para jugar y dar forma a figuras.
Entre música, juegos y sonrisas, el Centro de Equinoterapia de La Pedrera no solo celebró la infancia, sino también la inclusión, la amistad y la fuerza de una comunidad que crece unida.
El domingo 17, desde las 14:00 y hasta las 18:00, el equipo de Equinoterapia trasladó juegos y propuestas recreativas y artísticas al predio de La Calle Angosta. Allí se sumaron a la celebración que el municipio y el Gobierno provincial ofrecieron para que los niños y familias disfrutaran el día de los más pequeños.