FAUNA
Comenzarán a colocar rampas de rescate de aves en el norte provincial
El Centro de Conservación de Aves Rapaces (Cecara), junto al Área Natural Protegida Privada ‘La Siempre Viva’ y la secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable, darán inicio a una campaña que busca salvar centenares de aves y otros animales que mueren ahogados en tanques australianos.
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Entre el 20 y 27 de febrero el Centro de Conservación de Aves Rapaces (Cecará), con el respaldo de la cartera ambiental, desplegará una innovadora campaña en el norte provincial, en la zona de amortiguación del Área Natural Protegida Privada (ANPP) ‘La Siempre Viva’, cercana a las localidades de Santa Rosa del Cantantal y Chipiscú, que convertirá tanques australianos en espacios seguros que eviten el ahogamiento de aves y otros animales silvestres.
Solo contando con las provincias de La Pampa, Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe como área núcleo de producción ganadera en nuestro país, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) ha relevado un total de 250.000 tanques a través del Censo Nacional Agropecuario.
En el caso de la vecina provincia de La Pampa, se ha estimado que un promedio de 10 aves mueren ahogadas al año en cada tanque, por lo que el cálculo, aún siendo conservador, es de varios miles de aves que pierden la vida por este problema en nuestro país.
La acción es impulsada por organismos y colectivos vinculados a la conservación y tiene como objetivo instalar rampas de rescate en campos ganaderos, reduciendo así uno de los riesgos más letales para la fauna en zonas rurales y que en el área de distribución del norte de San Luis perjudica a especies en peligro de extinción, como el cardenal amarillo (del cual quedan 2.000 ejemplares) y el águila coronada (menos de mil ejemplares adultos).
Esta iniciativa está enmarcada dentro del plan operativo anual de la Ley de Bosques Nativos y cuenta con el respaldo de programas ambientales como el Fondo Verde para el Clima y la Fundación Rufford para transformar la infraestructura de los reservorios.
Las rampas, que ya han demostrado su eficacia en campañas previas en otras provincias, permiten que los ejemplares puedan salir de los tanques sin quedar atrapados, a la vez que contribuyen a mantener la limpieza de las aguas.
La primera acción, que será en las zonas cercanas a Quebracho de La Legua y el Parque Nacional Sierra de las Quijadas, sumará el esfuerzo de los productores de la región para el cuidado de la fauna nativa. De esta forma, la campaña no solo aborda el problema del ahogamiento de cientos de miles de aves que se estima ocurren cada año, sino que también establece un precedente de prácticas amigables con el ambiente, en el ámbito productivo.
Con esta acción, se busca generar un cambio palpable en la forma en que se gestionan los recursos hídricos en zonas rurales, sin olvidar la seguridad y el bienestar de la fauna local a través de soluciones sencillas y muy efectivas.