POLÍTICA HABITACIONAL
“Nunca pedimos que nos devolvieran la plata, teníamos la esperanza de que nos dieran la casa”
Como tantos vecinos, William Lucero y su pareja, Cynthia, pagaron cuotas para acceder a una vivienda social. Si bien sintieron frustración porque no se la entregaron en su momento, no perdieron la fe. “Esperamos hace mucho la casa, no vemos la hora de que esté lista para venirnos acá”, dijo el hombre.
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En su visita al barrio que se construye en la zona sur de la ciudad, para cumplir lo prometido a los preadjudicatarios de los planes ‘Progreso’ y ‘Sueños’, el gobernador Claudio Poggi hizo referencia a que seguramente en todos estos años que transcurrieron desde que se anotaron hasta ahora, que están a un paso de recibir su casa, sus familias crecieron, hay nuevos integrantes. Eso fue lo que les sucedió a William Lucero y a su pareja, Cynthia. Son padres de tres hijos, Camila, Bautista y Yoselin. Hoy la familia es tan grande como la ilusión del hogar propio.
Por ello, luego de tener la llave y hacer números, quieren hacer ampliaciones para estar cómodos. “Estoy muy contento. Esperamos hace mucho la casa. No tengo palabras para agradecerle al Gobernador lo que ha hecho. No vemos la hora de que esté lista para venirnos acá”, dijo William, con una amplia sonrisa.
“Ya sabemos dónde está nuestro lote, en la manzana E, la nuestra va a ser la casa 3”, contó el hombre, que en su primera visita sacó fotos, para tener en el celular un registro del lugar y su progreso. Este sábado volvieron y confirmó los avances.
“Hoy por hoy alquilamos, vivimos en una casa de barrio. Es un poco difícil porque en este momento yo no tengo trabajo pero mi esposa sí, así que tratamos de llegar acá lo más rápido posible. Lo mejor que nos puede pasar en la vida es estar aquí en la Navidad 2025, sería la mejor Navidad que podemos tener. Nunca perdimos la esperanza ni pedimos la devolución de la plata, ni nada de eso. Tuvimos la esperanza de que nos iban a dar la casa y, gracias a Dios, va a pasar”, expresó.
A Lili Provano se le humedecen los ojos: dice que, a sus 65 años, creía que la casa propia era un sueño imposible. Este sábado, en la primera visita al que será su hogar en la zona sur, pudo ver con sus propios ojos que no es una ilusión, que su hogar es real: hay paredes, ladrillos, hay un barrio, hay futuro.
“Siento tantas cosas. Tengo 65 años y sabes hace cuánto que espero mi casa. A esta altura, tener mi casa… Yo pensaba que ya no la iba a tener. Fue tremendo lo que nos pasó, estar pagando la cuota y, de repente, nos dijeron ‘no, no sigue más el plan, no te van a dar la casa’. Quedamos ahí, como si nunca nos hubiésemos inscripto, como si nunca hubiésemos pagado. Pero Poggi siempre prometió que si algún día ganaba iba a volver a a darle a la gente lo que él les había prometido. Y lo cumplió“, refirió.
Cuando tenga la llave, Lili se mudará con una de sus hijas y con un nieto. Mientras tanto, este sábado, alimentó su expectativa con la visita y su confirmación de que las obras caminan con paso firme. “Me parece que van a entregar rápido las casas”, dijo.