ECONOMÍA CIRCULAR
Nueva Galia será sede de una nueva jornada de recepción de envases fitosanitarios
Será el próximo lunes 28 de octubre de 9:00 a 11:30. Recibirán bidones y envases utilizados por los productores agrícolas de la zona.
La campaña de recepción de envases fitosanitarios de la asociación civil ‘CampoLimpio’ y la secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable llegará a Nueva Galia, en el departamento Dupuy. Productores de la zona están invitados a dejar sus recipientes de agroquímicos.
La iniciativa, que cuenta con la participación de la dirección de Gestión Ambiental de Residuos, ha recuperado más de 30 mil envases vacíos de agroquímicos, con un crecimiento interanual superior al 100%, entre las campañas y la tarea de los centros de almacenamiento transitorio (CAT) desde el inicio de la gestión. Luego comienza una etapa de reciclado y tratamiento para reinsertar los recipientes al mercado.
La cartera ambiental destacó que la acción es una herramienta clave para el cuidado ambiental que tiene como meta central evitar la acumulación de plásticos o envases fitosanitarios en los campos. Con ello, impiden que entren en contacto con la tierra, los ríos, el aire o incluso que no se mezclen con otros residuos domiciliarios.
La asociación ‘CampoLimpio’ cumple un rol fundamental en esta propuesta. El ente trabaja año a año a nivel nacional recuperando envases y promoviendo la concientización ambiental en distintos espacios para fomentar la economía circular.
Evitar el uso doméstico
La utilización de los envases vacíos para acumular agua es moneda corriente en las comunidades rurales. Algunos aplicadores los dejan tirados y hay gente que se los lleva. Aunque los lavan con detergente o jabón para poder utilizarlos como recipientes de agua, eso implica un peligro para la salud.
Dentro de cada envase vacío queda retenido aproximadamente un 2% del contenido del producto agroquímico. Por ejemplo, de un bidón de 20 litros, puede quedar hasta poco menos de medio litro que queda impregnado en las paredes, en la tapa o en el fondo del envase. Todo esto, representa un peligro para la salud humana y no debe caer en manos de las familias.
Los residuos fitosanitarios son residuos peligrosos y, por lo tanto, de acuerdo a legislación vigente, también lo son los envases que los han contenido. Al tratarse de un residuo peligroso, es preciso llevar a cabo una gestión adecuada y deben tomarse todas las medidas posibles para evitar su vertido indiscriminado, que provocaría graves problemas ambientales.