DÍA DEL NIÑO
El chocolate caliente calentó pancitas y corazones
Varias direcciones del ministerio de Desarrollo Humano coordinaron su trabajo para servir 1.300 litros a una multitud que agradeció el gesto. Todos quedaron con la satisfacción del deber cumplido.
Joaquín Mansilla, director de Barrios Populares, expresó que la jornada del festejo del Día del Niño estuvo muy bien organizada y concentró a muchos sanluiseños con ganas de pasar una tarde en familia. El stand de chocolate caliente, que fue uno de los más visitados, estuvo coordinado entre el ministerio de Desarrollo Humano y las direcciones de Barrios Populares, Infraestructura Social, Emergencia Social e Inclusión Laboral.
“Distribuimos más de mil litros de chocolate. Elaboramos, junto con los comedores populares, más de 5.000 panificados. La gente disfrutó un montón”, explicó Mansilla.
El reparto de chocolate caliente se sirvió de manera gratuita y fue un gran éxito: “Es una forma de brindar alguna merienda rica para los niños y niñas en su día, de poder estar cerca de los sectores populares y que puedan festejar la infancia”, agregó.
El equipo de Primera infancia asumió el compromiso de brindar mil souvenirs y platos de comida. Liliana Petrino, su directora, manifestó que se vivió una jornada excepcional: “Estoy maravillada. Todas las direcciones ministeriales pusieron mucho de su parte, esto quiere decir que la apuesta de ponerse la camiseta fue magnífica”.
Petrino recalcó que lo más importante es un niño: “Estos chicos son el futuro, pero ante todo son el presente: hoy están y van a estar después. Estoy fascinada con los equipos de gobierno y la contención de la infancia”.
Aunque la tarde estuvo parcialmente soleada, por momentos se nubló y hubo viento frío. Pero la convocatoria no disminuyó y a las 16:00 la carpa que entregaba chocolate caliente tuvo una copiosa afluencia. “Nosotros hemos calentado ollas y ollas con chocolate para todos. Me siento feliz porque para mí todos son hijos y todos fueron atendidos”, concluyó Petrino.
Marcela y Miriam, encargadas de cocinar el chocolate caliente en tres grandes ollas, comentaron que vivieron una jornada de felicidad. Brindaron 1.300 litros de leche para repartir a padres y niños: “La verdad que los compañeros han trabajado muy bien para que saliera todo lindo”, afirmaron.