SAN LUIS LIBRO
Concluyó el taller ‘Palabra y musicalidad: el ritmo de la poesía’
Estuvo a cargo del destacado escritor y gestor cultural Gustavo Romero Borri. El encuentro contó con un recital poético y entrega de diplomas a los participantes.
Con un emotivo acto, concluyó el taller ‘Palabra y musicalidad: el ritmo de la poesía’, que el destacado escritor y gestor cultural Gustavo Romero Borri dictó en el Antiguo Templo de Santo Domingo desde mediados de mayo y que se extendió durante siete jueves. El objetivo fue no solo de compartir reflexiones estéticas, sino también estimular la producción de textos originales en un clima de camaradería.
“Nos convocó el fulgor abrigador de la palabra poética que fue su principal motivo. En todos los encuentros se reflexionó sobre la poesía como género específico de lo que llamamos, en general, literatura. La poesía en las letras del mundo es el lenguaje por antonomasia de la intimidad humana y desvincula al creador del uso utilitario del lenguaje. En el curso hemos analizado esta realidad”, explicó Borri.
“Entre los asistentes hubo personas ya con libros publicados y otros que se asomaban a la creación literaria. Entiendo que para unos y otros estas conversaciones fueron positivas. Lo que yo saco en limpio, después de esta experiencia de intercambio y mutuo enriquecimiento, es que el ritmo en la poesía, como noción unida a la música, se ha cumplido”, consideró.
“Lo mejor que ha ocurrido es que hemos pasado muchas horas hablando y reflexionando sobre la literatura poética. No es habitual que acá en San Luis la gente ‘pare su reloj cotidiano’ y se consagre a este tipo de tareas. Hacer algo con lo que uno siente y piensa es casi un privilegio. Además, el Antiguo Templo de Santo Domingo fue un ámbito propicio para desarrollar este curso-taller. Todos los ruidos urbanos se acobardan al querer penetrar sus muros viejísimos. La poesía necesita mucho silencio para dejarse oír”, opinó.
Sueños y experiencias compartidas
Entre los participantes estuvo la escritora y actriz María Celeste Domínguez, que además ha sido premiada y publicada por San Luis Libro.
“Haber participado del curso me dejó mucho más de lo que hubiera podido imaginar. Por un lado, fue un tiempo de encuentro con pares, con colegas escritores con diversas miradas y estilos para abordar sus expresiones literarias, por ende, diferentes conocimientos y vivencias compartidas, lo que enriqueció infinitamente este curso”, expresó.
“Por otra parte, la propuesta de Gustavo fue rica desde múltiples perspectivas dado que, al saber que él nos transmitía netamente desde la métrica (como él bien lo expresaba ´como una excusa para juntarnos a hablar de poesía´) lo secundaban cientos de experiencias vividas, anécdotas y cotidianeidades con grandes poetas, lo que a mí me permitió palpar el quehacer poético en lo real, me lo trajo al ´aquí y ahora´, a lo nuestro, a las penurias, desafíos y alegrías que nosotros como autores, hoy, y desde nuestro anonimato, también atravesamos. Es decir, nos conectó con lo humano “del poeta” partiendo desde la mirada de sus poesías”, destacó la artista.