FIESTA PATRONAL
A pocos días de la festividad en Renca, un artista donó dos cuadros a la iglesia
Roberto Cignetti es un ferviente creyente que participa cada año de la celebración religiosa. Explicó que entregó las dos pinturas, una con la imagen de la cruz del espinillo y otra de un paisaje de la localidad, como una forma de agradecer a Dios el don de la vida.
Aunque es vecino de Tilisarao, Renca es un lugar muy especial para el artista Roberto Cignetti. “Desde chicos siempre hemos venido a Renca”, recuerda. Ahora ese sentir especial por el pueblo del Santo Cristo se ha profundizado. Cignetti, quien es pintor, hizo dos cuadros en óleo: uno de un paisaje de la localidad en donde se destaca el santuario, y otro de la cruz del espinillo. Días atrás donó ambas obras a la iglesia, que se prepara para recibir miles de feligreses en las fiestas patronales.
Hace muchos años que Cignetti eligió expresar su creatividad, sus sentimientos y aquello que lo emociona a través de la pintura. Desde muy chico comenzó a experimentar con lápices y pinceles. Como en esa época no había academias, estudió por correo. Por las responsabilidades laborales, primero, y después las familiares, dejó de pintar cuando todavía era joven. Pero el año pasado, una situación familiar le hizo hacer un clic. “Falleció un primo mío, al que había visto unos días antes y habíamos quedado en comer un asado. Cuando estaba de vacaciones, me avisaron que había fallecido. Entonces, ¿uno para cuándo va a dejar las cosas? ¿Cuándo uno va a hacer lo que le gusta? Volví a la pintura”, contó emocionado.
Su decisión de retomar la actividad artística está vinculada a un replanteo existencial, a una conexión muy profunda con su espiritualidad y con el valor que le da a la vida, que entiende como un don divino. “En el interior, uno siente que la vida no es de uno, que Dios te dio la vida y uno debe esa vida. Deberle a Dios no es poca cosa. Entonces, decidí regalarle las obras”, explicó Cignetti.
Una de las pinturas que creó se llama ‘Cruz del Limache’, y la otra, ‘Renca Antiguo’. “A la obra ‘Cruz del Limache’ la pinté el año pasado, recordando al Cristo que vino desde Renca, Chile, para acá. Tomé una imagen que había hecho un sacerdote allá, en lápiz, y la pasé a color. Y qué mejor lugar que éste para exhibirla”, consideró el artista. Sobre el paisaje que recreó en el otro lienzo dijo: “Siempre me gustó Renca, y quise traer una obra hecha por mí y que quede acá, como recuerdo. Esa imagen es de una foto muy antigua, cuando todavía no existía la plaza. Cuando éramos niños, y después de jóvenes, íbamos a bañarnos al balneario de Renca”, contó el artista, para quien es una tradición participar cada 3 de mayo de la festividad del Cristo.