MALVINAS, EL LEGADO
lunes, 22 abril de 2024 | 11:27

El honor de ser parte de la historia

Desde Cortaderas, José Antonio Altamirano regresa a los días en los que cumplía tareas en el ARA 25 de Mayo. Se siente honrado de haber sido parte de la gesta para recuperar las islas, tras tantos años de usurpación inglesa. Los días del conflicto fueron difíciles, tanto como la posguerra, asegura el veterano, que reivindica la valentía de los combatientes a pesar de su juventud. 

José Antonio Altamirano nació en Banfield y vive en Cortaderas. En 1982, su destino fue el portaaviones ARA 25 de Mayo, donde cumplió función de furriel. “Lo más complicado fueron los preparativos para la guerra, saber tu puesto, en caso que te peguen saber cuál era tu balsa. Para mí era un honor ser parte de la historia de Argentina, recuperar Malvinas no era nada para pasar por alto, después de tantos años usurpada por los ingleses”, afirmó el veterano, que hoy está en silla de ruedas, por una infección que le dificulta caminar.

El después de la guerra fue bastante duro, aseguró José. “No pude conseguir trabajo, tardó en llegar. Me las rebuscaba como podía. Para ese entonces ya me había juntado, era papá, todo era cuesta arriba. Éramos los loquitos de la guerra. Cuando te pedían antecedentes, te decían ‘cualquier cosa te llamamos’ y así pasó mucho tiempo”, recordó.

Si bien no desembarcó en 1982, en 2014 José tuvo la oportunidad de pisar territorio malvinense. “Fui a las tumbas de los soldados. Fue muy emotivo poder rezarles, me conmovió mucho. Ojalá que podamos recuperar las islas algún día, porque son bien nuestras”, anheló.

José dice que, si pudiera hablar con esos jóvenes y hombres que murieron y ganaron la gloria en Malvinas, les expresaría su total agradecimiento por haber brindado su vida. “Son de un valor impresionante. Muchas veces te dicen que sos un héroe. Yo digo que no, héroes son los que quedaron, héroes son los que derramaron su sangre, héroes son los que quedaron allá custodiando las islas”, refirió.

Para José, el legado es que no los olviden, que se sepa quién era cada uno. “A pesar de tener 17 años o 18, se tuvo mucho valor para defender la Patria. Recién nos sacaban de jugar a la pelota y ya fuimos a enfrentar a una potencia mundial, sin tener experiencia. Eso fue bastante triste. A pesar de que recordamos todos los días a nuestros caídos, para mí, el 2 de abril es un día muy lindo, porque a nivel país se recuerda a todos los combatientes fallecidos. Sé que ellos, desde algún lugarcito del cielo, nos darán las gracias”, dijo.