La Lepra mendocina se metió en 16avos de final en La Punta

Con una fiesta en las tribunas, Independiente Rivadavia de Mendoza avanzó este miércoles a la siguiente fase de la Copa Argentina al derrotar en el estadio ‘Juan Gilberto Funes’ a Argentino de Quilmes 1 a 0.

El único tanto del partido fue señalado a los 40’ del complemento a través de Francisco Petrasso y le sirvió a la Lepra para pasar de ronda. Ahora en la siguiente instancia jugará con el ganador del duelo que sostendrán por la otra llave, Banfield y Ciudad Bolívar.

El encuentro fue favorable al conjunto que dirige Martín Cicotello, que desde el inicio tomó el protagonismo necesario para quedarse con la clasificación aunque en la primera etapa no tuvo profundidad ni precisión para llegar con peligro al arco rival.

Los bonaerenses, por su parte, trataron de poner voluntad, sacrificio y despliegue para tratar de igualar el trámite y por momentos lo consiguieron, aunque sin tanto poder ofensivo como para complicar a su adversario. Sin embargo, la más clara fue para “El Mate” que, promediando la etapa, puso al centrodelantero Álvaro López mano a mano con el arquero Mariano Monllor, que le tapó la definición arrojándose a los pies del atacante.

En el segundo tiempo con el ingreso del mejor jugador mendocino, Matías Reali, Independiente comenzó a manejar mejor la pelota y haciendo sociedad con Juani Cavallaro, Luciano Abecasis y Emmanuel Más, crearon un par de situaciones como para desnivelar.

La Lepra intentó por todos los medios llegar al arco rival, pero los bonaerenses se abroquelaron atrás y parecía que era imposible llegar al gol.

Sin embargo, a los 40’, dos cabezazos en el área le dieron la victoria. Tras tres córners consecutivos de Riali, el central Francisco Petrasso solo tuvo que empujar la pelota luego de que el otro marcador central, Mauro Maidana, la bajara de cabeza.

Con amor propio Argentino fue a buscar el empate, pero ya no le quedó tiempo y la victoria se fue para Mendoza.

De esta manera, Independiente pasó por San Luis y dejó su sello, no solamente por la victoria, sino también por la fiesta que los “Azules del Parque” le pusieron en las tribunas.