MINISTERIO DE DESARROLLO HUMANO
Avanzan las obras en el Hogar del Medio Camino
Trabajan en la refacción de dos habitaciones, para cuatro personas cada una, destinadas a dar hospedaje a adultos mayores que deban llegar hasta la ciudad para asistir a turnos médicos.
Arreglos en paredes y techos, movimientos de muebles, reubicación de camas y puesta en funcionamiento de baños son algunas de la tareas que se llevan adelante en el Centro Integral del Adulto Mayor San Vicente de Paul para convertir una de sus alas en el Hogar de Medio Camino, un recurso indispensable para que los adultos mayores sin recursos que vienen a la ciudad por algún turno médico tengan dónde pernoctar.
La ministro de Desarrollo Humano, Mónica Becerra, junto a la directora de Personas Mayores, Dominga Torres, recorrió las dos habitaciones que dispone para alojar a ocho personas; cuatro mujeres y cuatro varones, con su batería de baños.
La finalidad del Hogar de Medio Camino es brindar hospedaje transitorio a los adultos mayores de 65 años, en situación de vulnerabilidad, que residen en el interior de la provincia y que deben asistir a la ciudad para concurrir a turnos médicos, hacerse estudios o tratamientos ambulatorios relacionados con su salud.
“Encontramos que muchas veces estas personas deben pernoctar en la ciudad porque asisten a varios turnos distribuidos en 2 ó 3 días. Esas noches sabemos que las pasan en malas condiciones, a veces hasta descansando en la misma Terminal de Ómnibus. Por eso pensamos en este espacio, que es grande, donde nuestros abuelos podrán registrarse y contarán con la posibilidad de higienizarse y una cama cómoda donde descansar”, explicó Becerra.
Actualmente, en el centro residen dos personas mayores, Miguelito Gatica y Andrés Avelino Sánchez, más conocido como ‘Juancito’. Ellos permanecerán allí y continuarán recibiendo atención y cuidados diarios. Las actividades socio recreativas, como talleres de pintura, zumba, tejido, folclore, yoga, lenguaje de señas y otros continuarán teniendo su espacio para aquellos abuelos que asisten durante el día desde diferentes puntos de la ciudad.
El cuidado estará a cargo de un equipo de más de 100 personas, divididas en turnos, que integran la Brigada de Acompañantes Solidarias, conocidas como Pañuelos Violetas, todas beneficiarias del Plan de Inclusión, que ya venían prestando servicio en este espacio.