VINCULACIÓN INTERJURISDICCIONAL
La Casa de San Luis en Buenos Aires suma nuevas funciones para el fortalecimiento de la provincia
Además de ser una joya arquitectónica única ubicada en Azcuénaga al 1000, es centro de múltiples servicios para los puntanos, como el asesoramiento para distintos trámites y la derivación de pacientes trasladados desde centros médicos de la provincia.
La Casa de San Luis, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y a cargo de la secretaría de Estado de Vinculación Interjurisdiccional, Gabriela González Riollo, es la representación oficial de la provincia en la ciudad de Buenos Aires y está abierta al público para ofrecer diversos servicios.
Proporciona asistencia y seguimiento de reuniones y actividades de ministros y secretarios gubernamentales en CABA y trabaja en la difusión de atractivos turísticos, culturales e históricos sanluiseños. Además, tiene como objetivo establecer y fortalecer vínculos con organismos internacionales y embajadas para promover el desarrollo, la cooperación y la proyección internacional de la provincia y atraer inversiones.
Desde la Casa brindan asesoramiento y gestión de trámites impositivos de Rentas y Registro Civil; derivación y control de centros asistenciales de salud para pacientes trasladados desde la provincia; y orientación, asistencia y apoyo a personas de la provincia en tránsito en la Ciudad de Buenos Aires; entre otros.
La Casa de San Luis en Buenos Aires está ubicada en Azcuénaga 1087. Quienes deseen, pueden contactarse al 011-5778-1665 o por mail a [email protected]. También se pueden comunicar a través de las redes sociales: Instagram: @casadesanluisba y por Facebook: CasaDeSanLuis.
Historia de la Casa de San Luis
El edificio en donde hoy funciona la Casa de San Luis en Buenos Aires fue construido en 1920 por Virginio Colombo a pedido de Carlos Lagomarsino, inmigrante italiano dedicado a la industria textil. Él solicitó a Colombo la creación de una casa con intenciones palaciegas, que dejara de manifiesto el nuevo rango social alcanzado.
La casa fue habitada por esta familia solo cuatro años, ya que luego de la muerte de Lagomarsino, su esposa e hijos decidieron poner el edificio en venta. El primer adquirente fue el doctor Riguera, que utilizó la casa como consultorio médico. Posteriormente, entre 1960 y 1969, funcionó en el edificio la primera Escuela de Aviación y el Servicio de Inteligencia de la Aeronáutica. A partir de 1973, se instaló una sucursal del Banco Interamericano Regional, el Banco de la Mujer, llamado Juana de Arco, que estuvo allí durante casi una década y realizó varias modificaciones edilicias. Luego de una quiebra, el Banco Central se hizo cargo de todos los bienes y los subastó por licitación pública cerca de 1982.
Finalmente la casa fue comprada por el gobierno de San Luis, que la inauguró como Casa de San Luis en 1985.