“Matrices y Procesos”: dos visiones delicadas que transforman la madera y el papel

A cargo de los artistas, Paula Nader y Julio Melto, la muestra abrió este viernes en el Centro Cultural “Puente Blanco”. Reúne texturas, relieves, rostros, bosquejos y figuras únicas elaboradas con maestría, paciencia e introspección.

En el marco de la convocatoria “Artes Visuales”, la exposición se puede visitar durante un mes. Con gran afluencia, se inauguró durante la tarde de este viernes, en un lugar especial y gratuito que invita al público a sumergirse entre perspectivas sutiles y minuciosas.

A la apertura asistieron la secretaria de Cultura, Silvia Rapisarda, el responsable de Patrimonio Histórico y Gestión Cultural, Gerardo Masman, y la artista Neda Olguín, quien estuvo a cargo de la curaduría.

“En estos espacios donde nosotros podemos contemplar las obras que son exhibidas por artistas puntanos, siempre uno se llena de emoción. El arte transforma. Estos dos grandes artistas han participado de una convocatoria lanzada para exhibir distintas obras en los espacios culturales, a cambio, por supuesto, de un reconocimiento económico. Nosotros entendemos que hay que apoyar a los emprendedores culturales, a las industrias culturales, y que el arte es trabajo”, sostuvo Rapisarda.

Por su parte, Julio Melto destacó la oportunidad de exponer en conjunto. Sus ideas creativas surgen de múltiples intentos y sensaciones. Si bien considera que su obra cambia lentamente, es claro que ese pulso sereno le ha permitido erigir una poética singular en la madera.

“La inspiración viene de distintos lugares. No es algo lineal. A veces es algo que te está pasando internamente, que viste, que te contó alguien, son distintas motivaciones. Y justamente el objetivo de la muestra también es mostrar estos intentos, los bosquejos”, indicó.

“En el 97´ hice mi primera muestra de madera. Mi obra cambia muy lentamente. No es una obra que va a tener cambios bruscos. Creo que casi como el reflejo de uno”, compartió el artista que agradeció a sus seres queridos que lo acompañaron durante la apertura.

“En el taller acompaño los procesos creativos de cada alumno en dos facetas. Una, resolver lo que quieren hacer técnicamente. Y otra, es tratar de movilizar alguna inquietud artística”, explicó el hijo del reconocido poeta Pablo Melto.

Paula Nader también se mostró entusiasmada por la exposición. Presenta grabados que había atesorado en su taller por mucho tiempo. Disfruta con los detalles y la minuciosidad estética. Con Julio, transmite la idea de que una obra no tiene un inicio y final definidos. Paula utiliza la técnica de collagraph en sus grabados, que se relaciona con la escultura. Lleva dedicándose al arte desde pequeña y ha elaborado temas como la soledad o la comunicación en sus trabajos.

“Hay grabados de 2006 que nunca los había mostrado. Estar en mi taller es un momento de mucha introspección, donde el tiempo se estira, haciendo cosas pequeñitas, me encanta”, expresó.

“A veces se empieza a trabajar en la cabeza, con una idea, en una imagen que te viene y queda latente, y después cuando vas al taller a la materia empieza a aparecer. Pero no es un momento preciso en el que empieza, sino que es medio difuso el proceso”, consideró.

“En esta exposición mis trabajos hablan un poco como de la soledad, de la incomunicación, cuestiones vinculares, con personas que son símbolos porque no tienen ojos, cara y volúmenes, sino que tienen elementos, relojes, hilos, agujas que los atraviesan. Son recortes y como medio fantasmagóricos”, describió Paula.

Al ofrecer detalles, matices y hasta fragilidades, la exposición: “Matrices y Procesos” genera cercanía con el público e invita a la pausa delicadamente en un cálido ambiente.

Nota y fotos: Prensa Secretaría de Cultura.