INCLUSIÓN
Programa Empezar: jóvenes que aprovechan un espacio para capacitarse y ganar experiencia laboral
Agustín obtuvo su primer oportunidad laboral a través de este Programa impulsado por la Secretaría de las Juventudes. Una vez finalizados los 6 meses de práctica, el 60% de los beneficiarios logran acceder a un empleo formal en el mismo lugar, según datos de la dependencia estatal.
El Programa Empezar es una política de Estado que tiene como objetivo capacitar y entrenar a las juventudes para que desarrollen conocimientos y habilidades que les permitan en el futuro acceder a un empleo formal. Desde la creación de la Ley de Juventudes, pasaron por el Programa más de 4000 jóvenes de toda la provincia.
Es así como Agustín Miranda, de 18 años, trabaja en la verdulería “Clarita” ubicada en Aristóbulo del Valle. El joven realiza tareas de reposición de productos y atención al cliente. El Programa Empezar prevé que chicas y chicos entre 16 y 24 años puedan tener una experiencia laboral con el objetivo de facilitar la inserción a través de un empleo formal. En total, deben cumplir con 20 horas semanales que se pueden dividir bajo el régimen que lo decidan las dos partes.
Agustín se enteró del Programa Empezar por su mamá. Desde el año pasado estaba interesado en trabajar en la verdulería que quedaba a unas cuadras de su casa. “Es muy lindo trabajar, te da experiencia para más adelante”, expresó.
Muchos de las y los jóvenes eligen un espacio laboral que les gusta y les queda cerca para economizar los gastos de movilidad, como es el caso de Agustín. “Mi horario laboral es de 10:00 a 14:00 vengo caminando porque vivo cerca”, contó. Cabe destacar que el 60% de los convenios entre la empresa, negocio y el beneficiario pasan a la formalidad, el otro 40% a través de la experiencia adquirida opta por iniciar algún emprendimiento, según datos de la Secretaría de las Juventudes.
Su primer trabajo fue en un negocio como ayudante de repostería y repositor, lo que lo ayudó a adquirir experiencia y ahorrar para su futuro. Además del trabajo en la verdulería, Agustín es amante de los videojuegos y películas.
“Con lo que me pagan por mi trabajo ayudo a mi mamá a pagar el alquiler y los impuestos de la casa, también guardo para mí y en un futuro poder comprarme lo que me guste”, manifestó el joven. Después de finalizar con la práctica laboral, que tiene una duración de 6 meses, Agustín proyecta comenzar sus estudios superiores y estudiar administración bancaria.
Nota y foto: ANSL.