“En San Luis la obra pública se hace donde se necesita y en tiempo y forma”

Lo afirmó el gobernador, Alberto Rodríguez Saá, en relación al lugar destacado que la obra pública ocupó y ocupa en su gobierno. “San Luis es un ejemplo de haber desafiado y vencido la ortodoxia económica que pretende descalificar a la obra pública, porque siempre entendimos que crea un circuito de desarrollo genuino estimulando el empleo y el consumo que hace crecer al comercio”, dijo.

Bajo el concepto que de “hay que ponerle alma al cemento”, el mandatario reflexionó: “Para que la obra en definitiva se concrete, requiere del esfuerzo de las personas para producir el diálogo entre la obra y la sociedad. Un edificio terminado nos enorgullece, cuando se produce el diálogo con la sociedad y entra en funcionamiento y el servicio que presta nos emociona y conmueve, estamos frente a una obra en la que le pusimos alma al cemento”, dijo.

Para evidenciar esta verdad y la importancia que la obra pública tuvo y tiene en su gestión, contó una anécdota protagonizada por el economista Paul Samuelson y el presidente John F. Kennedy en la década del 60. En la oportunidad, Kennedy se reunió con Samuelson y le contó que planificaba ejecutar un plan de obra pública para entusiasmar a la gente, a lo que el economista expresó su negativa y el plan no se llevó adelante.

“¿Saben por qué Samuelson dijo que no y Kennedy lo aceptó?”, dijo Rodríguez Saá, “porque no conocían a San Luis. Acá la obra pública se hace donde se necesita y en tiempo y forma. Ahí está La Pedrera en 1 año, ahí están las Terrazas del Portezuelo”.