PUNTANIDAD
Ricardo “El Cascarudo” Domínguez Arancibia, el cantor popular que abrazó al semillero de folcloristas puntanos
El músico, autor y compositor nació el 19 de octubre de 1943 en San Luis. De cuna de artistas que engalanaron el terruño natal durante más de tres generaciones, logró construir un estilo que trascendió fronteras. Su hijo, Ricardo “Casca” Esteban Domínguez comparte emotivos recuerdos, en un nuevo aniversario por el natalicio de quien se ganó el corazón y la admiración cuyana.
“A mi papá le gustaba armar el semillero, convocar a los jóvenes, soñaba con el crecimiento del folklore puntano y se llevaba muy bien con los chicos de aquella época como Marcos Figueroa, los hermanos Leyes, Martín Giménez, los integrantes de ‘La Cautana’ y de ‘Algarroba.com’. Él amaba a esos grupos porque cuidaban el folklore”, compartió Ricardo.
“También, por venir de una familia de guitarristas le costó mucho encontrar su estilo dentro de ese inmenso legado, así que tuvo que demostrar lo suyo y marcar su propia tendencia”, agregó.
“El Cascarudo” -apodado así por su manera de pelear entre sus compañeros de escuela- en el disco “De la misma sangre”, graba entrañables canciones de sus familiares, entre las que destacan “Viva San Luis”, “La casa de la abuela”, “A las sierras de San Luis”.
“Mi papá creó la ‘Asociación de Músicos en San Luis’, integrada en su mayoría por folkloristas. A la hora de componer primero hacía la música y después las letras. Me acuerdo que tarareaba todo el tiempo y andaba con una grabadora, por ejemplo, cuando viajaba en el auto. Una vez cuando hizo una canción para la Virgen de Villa Larca viajó y recorrió ese lugar para inspirarse. También cuando compuso la cueca ‘Hay que cumplir la promesa’ de la Villa de la Quebrada fue caminando, y contó todo lo que pasa con esa festividad de la cual era muy devoto”, recordó.
“Actualmente en la familia de a poco mi hijo Mateo está estudiando música y siguiendo con esa tradición. Por supuesto que en mi casa se escucha folklore todo el tiempo y cuando voy a una peña y escucho un tema de mi papá me emociono mucho”, compartió.
El compositor de entrañables tonadas murió el 6 de agosto de 2012, a los 69 años. En el álbum “De la misma sangre” retrató con afecto y poesía a sus antecesores. A continuación, sus cálidas reflexiones:
“No conocí a mi abuelo, pero a través del relato de mi madre y de las enseñanzas de los maestros naturales, ‘El Chocho’ y ‘El Flecha’, supe de su bondad, ternura y superlativo talento. De ellos pude abrevar un legado poético – musical que se grabó a fuego en lo más profundo de mi alma, despertando en mis irrefrenables ansias de cantar a mi pueblo. Me fue difícil lograr un estilo propio ante la fuerte personalidad de mis antecesores, ya que pareciera surgir de mi voz sus propias voces y despertar los arpegios y armonías que sus duendes escondieron en mis manos. ‘De la misma sangre’ es un sueño cumplido, es un sentimiento que llevo en el corazón y en la mente. Es el resumen de las más nostálgicas y populares canciones, cuya inspiración pertenece a autores, compositores y cantores populares de la provincia de San Luis, que por tres generaciones le vienen cantando su amor al terruño natal. Con profunda emoción incluyo en esta producción tres temas de mi autoría: ‘Para mi cuyana’, ‘Al viento Chorrillero’ y ‘La casa de la abuela'”, señaló.
Rafael “El Chocho” Arancibia Laborda
“Mi recordado tío fue docente, político, autor, compositor y cantor popular. Nació el 26 de junio de 1917, falleció el 19 de abril de 1982. Prestigiosos conjuntos folklóricos cuyanos y nacionales graban sus canciones subyugados por la sencillez, la belleza y profundidad de sus letras, que acabadamente expresan el sentir del pueblo. Es creador de inolvidables canciones con destacados autores y compositores, algunos con su poesía y otras musicalizándolas como ‘Digo la mazamorra’ de su amigo Antonio Esteban Agüero, a su ‘Campanita de Santo Domingo’ el delicado sabor musical lo realiza otro grande Adimanto Zabala ‘Zabalita’, con el doctor Horacio ‘Ocho’ Arrieta Cámara ‘El Picahueso’, con los hermanos fruteros ‘Tordo Viejo’, etc. De su exquisita obra escojo: ‘Caminito del norte’, ‘Mi testamento’ y ‘Coplas de mi padre'”, destacó.
Jorge “El Flecha” Arancibia Laborda
“Mi querido tío fue docente, autor, compositor y cantor popular. Nació el 27 de junio de 1919, falleció el 6 de noviembre de 1976. Al igual que ‘Chocho’, su hermano, sus obras son grabadas por los más populares conjuntos del país. Es coautor con Antonio Quiroga Allende de ‘De mis pagos’ y con su propio padre después de 40 años de fallecido éste, efectúa la inspirada musicalización de ‘A las sierras de San Luis’. El aroma de tizas, el gris azulado de nuestros cerros, el baile y canto criollo lugareño se recrean por la magia de su pluma y su guitarra y de su legendario conjunto folklórico ‘Los maruchos del Chorrillo’, integrado por Julio Cesar Agúndez, Emérito Carrera Merardo y Pedro Herrera. No existe ninguna grabación de este conjunto folklórico, ni tampoco del dúo que conforman los Hermanos Arancibia, pero todo su quehacer quedó registrado en el corazón de su amado pueblo. Seleccionó de su autoría: ‘El mate’, ‘A veces’ y ‘A las sierras de San Luis’, narró.
Ricardo Arancibia Rodríguez
“Mi abuelo fue procurador, político, autor, compositor y cantor popular. Nació el 9 de enero de 1883 y falleció el 12 de enero de 1931. Fue la raíz del árbol poético, cancionero de nuestra familia que se introdujo profundamente en las entrañas de la Puntanidad, para nutrir el inspirado arte de su pluma y canto con el atávico raigambre telúrico del sentir de un pueblo que escuchó y escucha emocionado, su zamba ‘Viva San Luis’ hasta convertirla en himno. En 1927 el dúo Magaldi-Noda la graba en discos ‘Víctor’ y rollos ‘Pampa’ junto a ‘Sauces del Chorrillero’, ‘Monte de oro’, ‘Mágica flor’, ‘La flor de alelí’ y tantas otras composiciones de su autoría. Contrae matrimonio con Primitiva Laborda, de esta unión nacieron sus hijos Ricardo, Alicia, Celia, Rafael, Jorge y Mireya (mi madre). De su prolífica obra interpretó ‘Viva San Luis’, ‘Lirio Azul’ y ‘Bellos celajes’, contó.
Nota: Prensa Secretaría de Cultura.
Fotos: Gentileza “Casca” Domínguez Arancibia.