EN LA UNIVERSIDAD DE LA PUNTA
Desde Santa Fe al Argentino Femenino de Ajedrez
Pamela Parma, de 34 años y Sofía Britos, de 17, son de Rosario y tienen algo en común, ambas empezaron a jugar desde muy pequeñas. Las dos destacaron la importancia de que cada vez más mujeres se sumen a este deporte y contaron como el ajedrez sigue formando parte de sus vidas. También forman parte del equipo Sofía Carnevale, Lucía Izaguirre, Julieta Gimenez y Camila Cuello. Todas pertenecen a la Escuela Interdistrital de Entrenamiento Intensivo de Ajedrez.
“Es mi segundo campeonato argentino”, precisó sonriente y un poco nerviosa Pamela, ya que en minutos debía presentarse para una partida. Además, señaló que este fue un nuevo comienzo. “Empecé a los 6 años y hasta los 17, ya que luego me dediqué a la facultad y a la docencia. Este año volví con ganas de jugar”, manifestó.
La jugadora destacó la organización del torneo que se lleva adelante en San Luis. “La provincia tiene una infraestructura increíble y estoy muy contenta de volver en esta ocasión, dado que se generaron beneficios y posibilidades que en otras competencias no tenemos. Eso es lo que me atrajo”, resaltó. Señaló que el ajedrez representa una parte importante de su vida. “Me acompaña desde chica en el aprendizaje y en la docencia, ya que soy psicóloga deportiva”, manifestó. “Esta bueno que se sumen más mujeres, este deporte es para todas”, expresó.
A la espera de que la llamaran para empezar la partida, Sofía, comentó que el saber que venían otras compañeras fue lo que la motivó a animarse a participar del torneo. “Cuando uno va solo es más complicado, pero cuando hay un equipo atrás, la preparación es distinta y se hace más ameno”, resaltó. Al igual que Pamela, era la primera vez que pisaba suelo puntano.
Precisó que es su primer campeonato superior. “En cuestión de resultados no me está yendo bien, algunas partidas las podía haber ganado, pero empaté con Candela Francisco, maestra FIDE y quien venía preclasificada primera. Con ese resultado quedé contenta”, confió la joven, quien remarcó que comenzó a jugar a los 6 años con su papá. “El ajedrez es mi cable a tierra y 4 veces por semana tomo clases, ya está implementado en mi rutina. Crecí en un ambiente en donde prácticamente no había mujeres, por eso es bueno que cada vez se sumen más”, concluyó.
Nota, fotos y video: Prensa ULP.