“La Iglesia de San José del Morro es un Monumento Histórico Nacional que está catalogado como patrimonio cultural”

Pilar Olivera Aguirre, arquitecta especializada en restauración de monumentos históricos y asesora en la materia del Ministerio de Obras Públicas e Infraestructura, destacó la importancia de la restauración total, que recibirá el templo construido en 1700, con una inversión del Gobierno provincial de $18 millones y un plazo de obra de de 200 días.

“Es un bien nacional que está catalogado como patrimonio cultural y por ello es importante que se mantenga porque guarda mucha historia y significa mucho para la identidad de todos los sanluiseños”, expresó Pilar Olivera Aguirre, arquitecta especializada en restauración de monumentos históricos y asesora en la materia del Ministerio de Obras Públicas e Infraestructura.

Tras el acto de firma de contrato de obra, la funcionaria explicó en el lugar, que este Monumento Histórico Nacional no solo es importante para la localidad, sino también para toda la provincia y la nación.

La iglesia lleva varios años sin restaurarse, y las que se le han hecho “no han sido adecuadas, lo que hace que un edificio se vaya deteriorando mucho más rápido de lo natural”.

La Iglesia posee una torre campanario y una sola nave, y también tiene un museo frente a la plaza principal dedicado a la historia regional, donde se exponen piezas religiosas que sirvieron actividades eclesiásticas entre 1650 y 1700, como una colección de cálices y prendas del Cura Brochero. La colección se formó con las donaciones de los vecinos y sigue incrementándose. También albergan importantes testimonios de la historia, como una carta del general San Martín, y utensilios de trabajo.

Olivera Aguirre señaló que esta restauración se llevará adelante con especialistas en el tema, previa aprobación de la Comisión Nacional de Monumentos Históricos. “Ahora, afortunadamente, se hace un esquema y una restauración con especialistas, por lo que este trabajo se hará en pos del buen construir de las patrimoniales, que no tiene nada que ver con la restauración de otro tipo de edificios”, agregó.

Los trabajos planificados son internos y externos, y lo más importante es el cambio de la cubierta, solados y restauración de la mampostería de adobe, según detalló. “Tenemos muros de 1,40 metros de ancho, que al estar mal intervenidos en anteriores restauraciones, presentan dificultades y se van deteriorando interiormente. Estas obras son muy nobles; si este tipo de construcción se restaura con el arte del buen construir, tiene para durar toda la vida, Si no lo hacemos de esta manera, nos pueden quietar la declaratoria de monumento histórico”.

Nota, fotos y video: ANSL.