CULTURA EN TIEMPOS DE CORONAVIRUS
“La función fue un concierto de bocinazos, guiños de luces y movimientos de limpiaparabrisas”
Fabián López, a cargo de la compañía Cirque XXI, contó cómo se vivió el show del autocirco en el predio del balneario municipal merlino, sobre el escenario “Antonio Esteban Agüero”, al aire libre y donde el público, desde sus vehículos vivió una experiencia cultural diferente.
El autocirco en la Villa de Merlo, el pasado fin de semana, fue la primera experiencia cultural que se realizó en el país en tiempos de pandemia. La flexibilización alcanzada en la provincia lo hizo posible gracias al estatus sanitario que se mantiene.
“Este formato salió del viejo autocine que conocíamos y le dimos la vuelta para hacerlo posible con todas las medidas de seguridad que corresponden”, dijo a ANSL Fabián López, responsable de la compañía Cirque XXI, quien compartió sus sensaciones tras la actuación que dejó más que conformes a las 30 personas que integran la troupe.
“Fue mucho más de lo que esperábamos. Pensamos que iba a ser un show frío y diferente porque los espectáculos circenses mayormente tienen mucho contacto con el público y mucha interacción y esa energía se trasmite, por eso no sabíamos con lo que nos íbamos a encontrar”, confesó Fabián.
Sin embargo, la respuesta del otro lado superó todas las expectativas a través de los casi 80 minutos que duró el show. “Reemplazamos el aplauso por la bocina, le pedíamos que si se reían mucho hicieran guiño de luces y, la verdad, fue un concierto de bocinazos, guiños y movimientos de limpiaparabrisas”, resumió.
El final de la función fue revoleando pañuelos y prendas al aire, con niños asomados por las ventanillas o techos corredizos de los autos. “Fue muy emocionante: la gente nos dio una devolución increíble”, expresó López.
Este fin de semana están confirmadas dos nuevas funciones en el predio del balneario municipal: sábado y domingo a las 17:00. Se espera que el feriado del lunes se agregue una más.
“Nosotros funcionamos como cualquier circo con carpa, trasladándonos con nuestros trailers y camiones de ciudad en ciudad. Estábamos en el club La Herradura cuando surgió este imprevisto de la pandemia luego de hacer funciones y volvernos a Buenos Aires para la temporada de invierno”, contó López sobre cómo surgió esta posibilidad. En las crisis también surgen oportunidades y quienes pueden aprovecharlas, reinventándose suelen salir fortalecidos.
“Vamos paso a paso. Ahora estamos disfrutando de este presente y ojalá que otras compañías circenses del país copien este formato y que otras expresiones culturales, como el teatro, puedan considerar esta iniciativa para llevar adelante su arte”, concluyó.
Nota: ANSL.
Fotos: capturas de video.