¿Creerán lo que dicen?
El presidente Macri afirmó que están las bases para seguir transformando el país. El ministro Lacunza, justificó la afirmación. ¿Realmente cree que estamos mejor que cuando inicio su período presidencial?
Desde fines de 2015 escuchamos repetidamente, como un mantra, “la pesada herencia”. Ahora antes de irse, el presidente dice: “Con estas bases que dejamos, le va a permitir (al nuevo presidente) seguir transformando”. No quiere quedar como un presidente que falló, que erró, que fracasó. Esto es tan importante para el primer gobierno que no pudo reelegir, que hizo dar una conferencia de prensa y publicar un documento al ministro Lacunza para convalidar sus dichos.
Por la tarde, ante algunos periodistas, el ministro afirmó con su habitual tono monótono, monocorde y hasta flemático, que existen “cimientos condicionantes para un crecimiento de largo plazo”. Lo dijo pese a reconocer en ese mismo acto que la deuda aumentó en US$ 74.000 millones y que de los US$ 44.000 recibidos del FMI solo quedan 4% en las reservas. Dijo que quedan “bases sólidas” pese a reconocer que la actividad económica (PBI) se contrajo un 3,4%.
Justificó casi todos los malos indicadores. La pobreza aumentó notablemente, sin embargo sostuvo que están en “un nivel similar al promedio de los años desde la recuperación de la democracia”. Pese a casi duplicar el nivel inflacionario, intentó justificar diciendo que “no era posible sincerar los precios relativos distorsionados”. Sobre el crecimiento de la desocupación, justificó diciendo que no había estadísticas confiables en 2015 y por ello cree que son similares, solo admitió que hubo “un deterioro en la calidad del empleo”.
Estas increíbles manifestaciones que contradicen los índices oficiales del propio gobierno, nos llevan a preguntarnos si realmente creen lo que dicen. Hace un tiempo, un político de origen bonaerense, dijo en una mesa que compartí “no hay que comprar lo que uno vende”.