IBAN AL HOSPITAL DE BUENA ESPERANZA
Parto de emergencia en el sur puntano: Julieta nació en una ambulancia
Su mamá rompió bolsa y de urgencia la trasladaron hasta la localidad. Sin embargo, la pequeña Julieta no quiso esperar y nació antes de llegar.
Este martes, poco después de las 14:00, Pamela Córdoba, de 34 años, llamó al Hospital de Día de Nueva Galia para pedir ayuda: acababa de romper bolsa y estaba a punto de tener a su hija. La ambulancia llegó de inmediato con el médico Carlos Mereli, quien decidió trasladar a la mujer hasta el Hospital de Buena Esperanza, para una mayor asistencia por si surgía alguna complicación en el parto y que quedaran en observación las primeras 24 horas.
Pero la pequeña Julieta tenía otros planes y no esperó para llegar hasta el centro médico del pueblo vecino y nació antes de llegar.
La mujer tenía un embarazo de 39 semanas y 6 días de gestación. La nena es el cuarto hijo que tiene. El nacimiento de Julieta fue por parto natural y no tuvo complicaciones.
“Cuando llegamos a socorrerla la recostamos en la ambulancia y le realicé tacto. Enseguida me di cuenta de que estaba con dilatación completa, con su beba ya casi por nacer”, reveló el doctor Mereli.
“Decidimos ir a Buena Esperanza por si surgía alguna complicación. Además, estábamos en camino y ganaríamos tiempo. Pero el parto fue normal y sin complicaciones. Pamela no sufrió nada. Este es su cuarto hijo y los tuvo a todos por parto natural nos contó”, reveló el médico.
El equipo que iba en la ambulancia estaba compuesto por dos enfermeras: Roxana Montani y Claudia Araya, que ya estaba con la mujer embarazada en su casa.
Las enfermeras comentaron que todo transcurrió con normalidad y en calma. “Cortamos el cordón y el nacimiento fue en Buena Esperanza. La beba pesó 4 kilos. Nació alrededor de las 14:30. Las dos quedaron internadas, pero tanto la mamá como la beba gozan de buena salud. En 24 horas tendrán el alta”, reveló Mereli.
“Fue una linda experiencia, el equipo respondió muy bien, con total calma y buenas decisiones”, afirmó el médico que hace solo un mes trabaja en Nueva Galia. Sin embargo, es la segunda vez que asiste un parto.
“En el primero llegamos justo a tiempo a Buena Esperanza. Cuando nos preguntan qué hacemos en el sur, les respondemos que estas son las cosas y situaciones que tenemos que resolver. Se necesitan médicos que vayan a ver a los pacientes ante una emergencia”, destacó.