Volver a Cosquín

Marcelo Palacio es el coordinador de los coreógrafos que integran la delegación de San Luis que participará en la 59ª edición del Festival Nacional de Folclore. Una vez más se siente orgulloso del trabajo realizado con los artistas de diferentes puntos de la provincia. 

El escenario de Cosquín es un territorio conocido para Marcelo Palacio porque hasta 1969 su padre, “Cototo” Palacio, tuvo la delegación oficial y él asiste al Pre Cosquín desde 1997. Si bien recién en 2008 ganaron en ese certamen que les permitió presentarse en el escenario del Festival Nacional de Folclore con la Escuela de Arte San Luis, luego volvió en numerosas oportunidades pero como coreógrafo o director.

Con respecto a las tareas que desarrolló para esta presentación, comentó: “Lo primero fue realizar una exhaustiva investigación, luego se realizaron las audiciones abiertas para artistas de toda la provincia. Posteriormente a la selección se confeccionó una lista de titulares y suplentes, para luego comenzar a armar el espectáculo”.

Para Palacio, trabajar con la delegación de San Luis es algo muy especial porque “es demostrar que tenemos artistas capaces de hacer todo lo que se ve en el mundo y en las grandes capitales donde hay una importante movida cultural, que en San Luis tenemos todo para hacerlo. Lo único que necesitamos es el espacio que en este caso se abrió con una delegación, con un casting abierto, con artistas que confían en el proyecto y a partir de ahí se generan grandes producciones que son posibles gracias a la calidad artística, porque los artistas son los intérpretes de la obra”.

Nacido en el mundo de la danza

Marcelo Palacio no tiene recuerdos que no estén relacionados con la danza, porque desde que nació sus padres “Cototo” Palacio y Alicia Hissa de Palacio eran directores de la Escuela de Arte San Luis. Allí estudió música y danza. Cuando llegó el momento de ingresar a la universidad eligió Bioquímica, pero luego de graduarse comenzó la Licenciatura en Arte en mención danza folclórica y tango, en la Universidad Nacional de las Artes (UNA). Concluida esa etapa, comenzaron a convocarlo como jurado en grandes festivales nacionales e internacionales y desde hace varios años es el director de la Escuela de Arte San Luis, en la que trabaja con la misma pasión que el primer día. “Por año asisto a veinte eventos nacionales y con la Escuela, a cinco como mínimo. Siempre representando a la provincia con las mismas ganas, la misma responsabilidad. Porque nos motiva mostrar al resto lo que trabajamos durante el año, y los artistas necesitamos alimentarnos del público, del aplauso o de sus opiniones”, afirmó Palacio.

Nota y foto: Prensa Cultura.