1º DE AGOSTO
Día de la Pachamama: una ocasión para agradecer a la tierra
La celebración ancestral permite reflexionar sobre el cuidado de los recursos naturales.
Una lectura medioambiental puede hacerse de este rito que atraviesa también al folclore puntano. Las sierras, como tantos paisajes y rincones, invitan a recordar el lugar del hombre entre los elementos.
“El cerro era la salvación de los afligidos lugareños que veían en él a su protector. Era el encargado de cumplir el mandato de la Pachamama: cuidar a los hijos nacidos de su vientre y salvarlos de los peligros y de la muerte”, explicó el historiador Jesús Liberato Tobares.
El 1º de agosto, las culturas ancestrales adoran a la Madre Tierra pero los festejos se extienden durante todo el mes. Los pueblos originarios agradecen por la cosecha y el tiempo. Se acostumbra beber caña con ruda para limpiar el espíritu y espantar la muerte. Pero más que de sorbos, también se trata de acompañar este mes con el sabor del suelo y las raíces. Ofrendar un poco de tiempo para recordar qué nos sostiene.