UNIVERSIDAD NACIONAL DE LOS COMECHINGONES
La Licenciatura en Meteorología generó expectativa en la región
La Universidad abrirá la carrera en 2018. Las preinscripciones se reciben en los sitios web de la institución. Villa de Merlo será el único lugar del interior del país que tendrá esta licenciatura.
La Universidad Nacional de los Comechingones (UNLC) abrirá en 2018 la Licenciatura en Ciencias de la Atmósfera y Meteorología Aplicada y desde septiembre recibe las preinscripciones en sus sitios web. Esto generó mucha expectativa no sólo en San Luis. A diario, la UNLC recibe consultas desde distintas provincias.
“Hoy se puede estudiar –Meteorología- en la Universidad de Buenos Aires o en la Universidad Nacional de La Plata. Entonces, abrirla en Villa de Merlo implica darles la posibilidad a muchísimos chicos de la región oeste del país”, dijo esta semana la rectora Agustina Rodríguez Saá, entrevistada por FM Lafinur, de la Ciudad de San Luis.
La rectora aseguró que el egresado de Meteorología, además de dar el pronóstico del tiempo, “puede hacer estudios desde el clima, que es una escala más global, hasta temas muy puntuales como estudiar y actualizar información sobre el fenómeno del granizo o los tornados”.
“Nuestra carrera está orientada a que los profesionales puedan prestar servicios a empresas que requieran de un meteorólogo para hacer predicciones y cuidar su producción. En Mendoza, por ejemplo, hay muchos expertos por el tema del granizo y la complicación que esto puede llevar a la vid”, dijo Rodríguez Saá.
La rectora consideró además que “el meteorólogo, dependiendo del lugar en el que se radique, podrá especializarse en inundaciones, en lluvias, en distintos fenómenos de la zona en donde trabajen”.
Por otro lado, consultado recientemente por Canal 13 de Río Cuarto, el director general de Ciencia y Tecnología de la UNLC, Franco Todone, aclaró que el objetivo de la institución merlina es “regionalizar el estudio de la meteorología, no sólo en la oferta académica sino también en el desarrollo tecnológico y científico a la vez”.
“El impacto que estamos provocando sobre el clima y lo que el clima genera sobre nuestras actividades es cada vez más evidente. El rol que está tomando el meteorólogo en todo esto es crucial”, aclaró Todone, quien también es profesor de la Universidad.
El ingeniero consideró que “la matriz productiva de la Argentina depende en gran medida de los fenómenos climáticos. Pero no solamente lo productivo, sino que en la prevención de desastres naturales también cobra mucha relevancia el rol profesional del meteorólogo”.
Todone dijo que “faltan meteorólogos” y que lo que actualmente se hace “es sacar de plataformas web modelos de otros países y aplicarlos en la Argentina. Entonces el margen de error es alto”.
“Faltan desarrollar en cada lugar los modelos predictivos para mejorar los pronósticos. En este caso lo que necesitamos son profesionales, porque la tecnología está”, explicó.
En ese sentido, la rectora contó que San Luis “tiene una importante infraestructura con la red de estaciones meteorológicas. Esto facilita mucho la implementación de esta carrera, que es muy técnica”.
Los interesados en esta carrera pueden preinscribirse a través de www.unlc.edu.ar o www.launi.com.ar. En febrero comenzará el Curso Preparatorio Universitario, que durará todo el primer semestre del año que viene, y en agosto empezará el dictado de la carrera. Esa licenciatura tendrá un cursado de 5 años.
Los fenómenos meteorológicos impactan cada vez más en la vida cotidiana y productiva de las personas. El clima está en todos lados, impacta desde todos los ejes”, dijo Todone.
Agustina Rodríguez Saá, por su lado, puso como ejemplo lo que ocurrió con el huracán Irma en Estados Unidos y toda la gente que trabajó realizando previsiones para evitar un desastre. “Son predicciones que se pueden hacer y que con el cambio climático van a ser más recurrentes. Cada vez se va a necesitar más gente especializada en estos temas, porque hay un campo de acción muy grande para abordar”, aclaró.
Nota y foto: Prensa Universidad Nacional de los Comechingones.