INCLUSIÓN SOCIAL
Los chicos de 4º año de la “Lucio Lucero” aprendieron cómo se construyen vínculos sanos de pareja
Se trata del taller que ofrece la cartera social para alumnos de los últimos años del secundario, con el propósito de prevenir la violencia de género. La propuesta aborda las características positivas y negativas de los noviazgos con enfoque en la etapa adolescente.
En busca de evitar las relaciones conflictivas, que suelen desembocar en violencia de género, el Ministerio de Inclusión Social desarrolló este jueves un nuevo encuentro del ciclo denominado “Vínculos sanos, prevención de violencia en el noviazgo”. En esta ocasión, la charla se ofreció para alumnos de 4º año del Centro Educativo Nº 8 “Maestras Lucio Lucero”, tuvo lugar en las oficinas del Subprograma Mujer y Comunidad, en el edificio administrativo de calle Ayacucho.
La apertura de la jornada estuvo a cargo del ministro de Inclusión Social, Gastón Hissa, quien les explicó a los alumnos la dinámica de la propuesta: “El objetivo es ofrecerles una serie de ítems para que estén atentos, porque más del 75% de los casos de violencia de género registran antecedentes en el noviazgo”.
El funcionario también señaló que con esta charla ya han recorrido más de treinta establecimientos educativos, y que a lo largo del ciclo surgió la necesidad de establecer una vía directa de comunicación con los chicos, por lo que se creó la fanpage de Facebook “Te Escucho. Subprograma Mujer y Comunidad”, que permite una interacción privada y personalizada.
Además, indicó que el Subprograma brinda contención, asistencia y asesoramiento en su oficina. Y también se pueden hacer consultas por teléfono a los números 0266 / 4451109 o 4451128.
La violencia como proceso
Durante la charla, los profesionales de Inclusión Social hicieron hincapié en que la agresión física es la manifestación extrema de la violencia. Pero que suelen darse otras conductas antes, como las agresiones verbales, psicológicas e incluso económicas, que dan indicios de la situación. Allí es donde deben poner límites. No esperar el grito, el insulto o el golpe. Lo ideal es que haya diálogo para expresar lo que nos hace mal, al decirlo ya se traza un límite, si no funciona hay que dar un corte a la relación. En un primer momento será doloroso, pero hay que dar el paso, explicaron a los jóvenes presentes.
La jefa de Mujer y Comunidad, Cristina Bustos Fara, manifestó: “Generalmente las parejas pasan por una ‘etapa simbiótica’, de gran apego, en la cual disminuye el contacto con los amigos y otros vínculos cercanos”. En contraste, remarcó que “se debe tener proyectos en común pero también propios, y mantener aquellos que se tenían de forma previa al noviazgo”.
Los síntomas y el tipo de vínculo
Durante la propuesta, los especialistas especificaron que los celos, el control obsesivo y la falta de respeto hacia la pareja pueden ser indicios de que la relación no va por buen camino. Otro punto que destacaron es el espacio individual. Por ejemplo, indicaron que cuando se revisa el teléfono de la pareja o se controla la forma de vestir, que son situaciones que pueden entenderse como normales o inofensivas, a la larga pueden traer consecuencias negativas.
Por último explicaron que hay que estar atentos al individualismo, al trato del otro como cosa, a la falta de proyectos individuales y al intento de cambiar a la otra persona. Y remarcaron la actitud posesiva, la impulsividad seguida del arrepentimiento, y la descalificación como otros factores de alarma. Mientras que para establecer vínculos sanos, señalaron que “debe haber confianza, libertad, diálogo con pares y con la familia, tolerancia, creatividad y cuidado por el otro”.
Nota y foto: Darío Calderón – Prensa del Ministerio de Inclusión Social.
Corrección: Mariano Pennisi.
Contenidista: Rosana Freite.