PROTECCIÓN A LA MUJER
Avanza la implementación del sistema de botones antipánico
Hasta el momento hay 40 dispositivos activos, pero se entregan de 1 a 3 por semana. Este martes, funcionarios de las carteras de Seguridad e Inclusión Social se reunieron para optimizar los procedimientos de asignación.
Con la idea de alcanzar la mayor efectividad en la contención de las víctimas de violencia familiar y de género, el Gobierno provincial puso en marcha el sistema de botones antipánico, cuya demanda empezó a crecer en las últimas semanas. Funcionarios de los ministerios de Inclusión Social y de Seguridad mantuvieron una reunión este martes en el Faro de la Sabiduría, donde funciona el control del sistema, para evaluar los mejores procesos de asignación y optimizar el trabajo coordinado.
El titular de la cartera Social, Gastón Hissa, manifestó que “cada semana entregan desde el Subprograma Mujer y Comunidad entre 2 y 3 de estos dispositivos”, y señaló que “el creciente interés por parte de la víctimas se debe a que hay un mayor conocimiento del sistema”.
“Los botones son asignados por la justicia, pero también pueden ser concedidos por Mujer y Comunidad, y el Centro de Atención a la Víctima del Delito, tras fundamentar esa necesidad con informes profesionales de nuestro gabinete interdisciplinario. Por el momento hemos entregado 40, pero crecen los casos que requieren la herramienta”, explicó el funcionario.
Hissa, además resaltó que “la protección de las mujeres que padecen este flagelo es una política de Estado”. En ese sentido, subrayó que “el objetivo es reaccionar rápido”, por lo cual los botones son establecidos mediante procesos ágiles. “Si la víctima lo requiere se le asigna inmediatamente, luego de evaluar indicadores que dan certezas sobre la situación”, dijo.
Al mismo tiempo, el ministro puntualizó que ambas carteras hacen un seguimiento de cerca de cada caso. Y detalló que el Centro de Atención de Emergencias 911 registra datos y genera reportes sobre el funcionamiento o no de cada botón, su ubicación y diversa información. “Por ejemplo, si nos avisan que uno lleva dos días apagado, urgentemente vamos a constatar qué pasó. Esto suma eficiencia, es un aporte más para ayudar a la víctima”, indicó.
Capacitación e intercambio de ideas
En lo que respecta al trabajo coordinado, Hissa recordó que a principio del mes pasado, la cartera Social organizó unas jornadas para todo el personal del Centro de Atención de Emergencias. Y adelantó que replicarán la propuesta para personal que se ha sumado recientemente en esa dependencia.
“En esta política trabajamos juntos el Ministerio de Inclusión Social y el Ministerio de Seguridad, entonces, estos encuentros sirven para compartir puntos de vista, corregir y pensar nuevas estrategias para ser más eficientes”, afirmó el ministro.
Sobre el objetivo de los talleres, Hissa recalcó: “Nos parece muy importante que estén capacitados en las características de las víctimas de violencia familiar, porque son ellos quienes tienen el primer contacto y van al encuentro para ayudarlas. Lo que buscamos es que la persona no sea revictimizada en ese procedimiento”.
¿Cómo funcionan?
Los dispositivos son similares a un teléfono celular. Poseen un botón que las mujeres pueden accionar ante una situación de emergencia. De ese modo, envía una alerta al Centro de Operaciones, ubicado en el Faro de la Sabiduría, donde también funcionan las cámaras de seguridad, y desde ahí se avisa a los móviles policiales para prevenir los casos de violencia.
Cuentan con un sistema GPS, que permite dar con su ubicación exacta, y posibilita grabar el audio del ambiente, que queda registrado.
Nota y foto: Darío Calderón – Prensa Ministerio de Inclusión Social.
Corrección: Berenice Tello.
Contenidista: Fernando Romero.