OLIMPÍADAS DEL CONOCIMIENTO
Aprendizaje, diversión y compañerismo, en un viaje de estudios inolvidable
Durante una semana, los 45 ganadores de las Olimpíadas Sanluiseñas del Conocimiento disfrutaron de una experiencia que, sin dudas, nunca olvidarán. El Aquarium de Mar del Plata, las playas de “la Feliz”, el Bioparque Temaikén y el Teatro Colón, en la Capital Federal, son algunos de los lugares que visitaron los chicos en su viaje educativo.
Finalmente, el estudio, el esfuerzo y la dedicación, dieron sus frutos. Los ganadores de las Olimpíadas Sanluiseñas del Conocimiento 2014, impulsadas por la Universidad de La Punta (ULP), disfrutaron de una semana inolvidable en Mar del Plata y la Capital Federal. Los olímpicos conocieron sobre la historia de nuestro país, recorriendo distintos lugares turísticos y culturales.
Delfines y lobos marinos, el gran atractivo marplatense
En su primer día en “la Feliz”, los chicos disfrutaron de una jornada recreativa en el Aquarium. Allí conocieron mamíferos marinos, aves exóticas, peces, entre otros animales. Uno de los momentos que más llamó la atención de los olímpicos fue el show de delfines, mamíferos que demostraron su inteligencia. Los entrenadores les mostraron a los chicos cómo se comunican con estos animales. En tanto, los lobos marinos se destacaron en su espectáculo por ser buenos nadadores.
“Es la primera vez que visito el mar. Es inmenso. Estoy feliz de disfrutar del mar y jugar con mis compañeros de viaje”, contó Aldo Torres (7), alumno de la Escuela “Puertas del Sol”, que participó con su grupo en la disciplina de Astronomía. Y añadió: “Estudié mucho durante todo el año con la ayuda de mi profesora y de mi mamá. Con mi compañera aprendimos sobre las constelaciones, los astros y las estrellas”.
En tanto, su compañera de equipo, Solange Díaz (7), expresó: “A este premio lo vivo como un sueño hecho realidad. Es la primera vez que veo el mar. Sentí mucha emoción”. Asimismo, contó que, además de la playa, disfrutó del show de lobos marinos y delfines.
Un paseo por el Bioparque Temaiken
En su estadía en la Capital Federal, los olímpicos tuvieron contacto y conocieron distintos animales en el Bioparque Temaiken, donde aprendieron sobre la naturaleza, el cuidado de los animales y se divirtieron. Este atractivo turístico cuenta con 30 hectáreas de exposición animal y con alrededor de 2.700 especies, algunas en extinción. El mismo comprende zoológico, un jardín botánico, un museo de ciencias naturales y un acuario. Además, tiene puentes de madera, con mucha vegetación y árboles.
Lo más llamativos para los chicos fueron los hipopótamos, las chitas, los pumas y las suricatas. Además, el sitio ofrece Cine 360°: se proyecta una película con la historia del mundo. También cuenta con centros interactivos, acuario, y un espacio específico para las aves.
Durante el paseo, los ganadores observaron distintos entrenamientos de animales, como el del hipopótamo, donde se muestra la relación con los cuidadores; aves cazadoras con las que se realizó una exhibición de vuelo a cielo abierto; y los murciélagos, donde los cuidadores muestran los secretos de la dieta de estos animales asiáticos.
Asombrados por el Teatro Colón
En el último día, los ganadores olímpicos tuvieron una experiencia única, al visitar el Teatro Colón. Al ingresar, una guía del lugar explicó la construcción histórica del teatro, que se construyó en 18 años: comenzó en 1890 y terminó en 1908.
En la entrada principal puede observarse el piso, las columnas y las escaleras de mármol, de distintos tipos. En el primer piso, se ubica el Salón Dorado. Allí, puede observarse una galería de bustos, que comprende distintos compositores famosos como Gioachino Rossini, Wolfgang Amadeus Mozart, Ludwig van Beethoven, Giuseppe Verdi (este último es el más importante, ya que con su música se inauguró el Teatro Colón).
Pero el momento más hermoso y emotivo, fue cuando la guía abrió las cortinas de terciopelo bordó, y daba la bienvenida al inmenso escenario del Teatro Colón. El mismo tiene capacidad para 2.487 personas sentadas, a esto se le agregan más de 300 lugares para espectadores de pie, distribuidos entre platea, cazuela, tertulia y paraíso. Se destaca por su diseño europeo y sus valiosas reliquias históricas.
Después de este recorrido, los olímpicos almorzaron en La Biela: un antiguo bar de Recoleta. Al ingresar al lugar, puede verse una escultura de Jorge Luis Borges y Adolfo Bioy Casares. Estos grandes escritores eran amigos y solían frecuentar el lugar juntos. Además, el lugar está decorado con fotos en blanco y negro, con campeones automovilísticos.
Informes: [email protected] – Tel: 4452000 (interno 6089).
Nota y fotos: – Julieta Sosa Cerutti – Enviada especial ULP.