SEMANA SANTA
El pueblo católico vive el Triduo Pascual
La comunidad católica de todo el mundo conmemora, paso a paso, los últimos acontecimientos de la vida de Jesús, desarrollados en tres días. El Triduo surge como celebración de la fiesta grande de la Pascua, a partir de su vigilia, e incluye la totalidad del misterio pascual. La celebración anual de la Pascua data del siglo II.
El Triduo Pascual se presenta como la culminación de todo el año litúrgico. Cristo redimió al género humano y dio perfecta gloria a Dios, principalmente a través de su misterio pascual: muriendo destruyó la muerte y resucitando restauró la vida.
Este miércoles 1 de abril comenzó el Triduo Pascual con la Solemne Misa Crismal presidida por el monseñor Pedro Daniel Martínez Perea acompañado por el Vicario General monseñor Fernando Spalla, el Vicario para la zona Sur presbítero Miguel Arce, y todo el clero.
La Misa Crismal, presidida por el obispo y concelebrada con los presbíteros de la Diócesis, es la celebración en la que se consagra el Santo Crisma (de aquí su nombre) y bendice además el Óleo para los enfermos y el Óleo para los catecúmenos.
El obispo recordó que celebrar la Santa Misa es la función propia del sacerdote, por encima de cualquier otra labor social o pública y agradeció a los sacerdotes del norte de la provincia por la asistencia que brindaron a las personas afectadas por las inundaciones.
El jueves 2 de abril se celebró en toda la Santa Iglesia la Institución de la Eucaristía. En la Misa de la Cena del Señor, monseñor Pedro Daniel Martínez reflexionó sobre el amor de Dios al hombre hasta el punto de entregar a su propio Hijo, Jesucristo. “Todo en la Misa brota del amor de Cristo, en primer lugar el Sacerdocio”.
Después de la homilía, el obispo diocesano lavó y besó los pies de doce niños de la catequesis recordando a Jesucristo, quien lavó los pies de los apóstoles.
Al finalizar la Santa Misa, la Sagrada Eucaristía fue trasladada hasta el monumento, donde quedó para la adoración de la Santa Cruz el día Viernes.
Visita a las siete iglesias en distintas localidades:
Este Jueves Santo, finalizada la Misa de la Cena del Señor, el obispo de San Luis realizó la tradicional visita a las siete iglesias. El primer monumento en que se adoró al Señor fue en la Iglesia Catedral, donde además el obispo hizo una meditación a los fieles presentes.
El segundo monumento que visitó, fue en la parroquia San Antonio de Padua, en Naschel, donde fue recibido por el presbítero Juan Quevedo y los fieles de la parroquia. Posteriormente, la Capilla Nuestra Señora de Lourdes en La Toma donde el presbítero Rogelio Safigueroa, junto a numerosos fieles, se encontraban en recogida oración y recibieron con profunda alegria al obispo. El cuarto monumento fue en la Parroquia Jesús Obrero de Justo Daract, alli dirigió una meditación a la gran cantidad de fieles que se encontraban junto al presbítero Eduardo Rivero. El quinto monumento fue en el Convento Nuestra Señora de las Mercedes de las Hermanas del Instituto “Mater Dei” en Villa Mercedes. El sexto monumento fue en la Parroquia Nuestra Señora de Pompeya en Villa Mercedes, donde un gran número de boy scouts se encontraban adorando al Señor junto al presbítero Carlos Lopez. Por último, fue a la Parroquia Nuestra Señora de la Mercedes en Villa Mercedes.
Nota: Fernando Romero.
Fotos: Tino Videla / Obispado de San Luis.
Fuente: Obispado de San Luis.
