TOUR DE SAN LUIS 2015
Apostillas de un itinerario, segundo día
El doble de Nairo no es cualquier doble, es nada más ni nada menos que su hermano Dayer. Tiene 22 años y físicamente son idénticos. Forma parte del equipo Movistar y este año intentará hacer su debut en una de las tres carreras más grandes del mundo. El objetivo del cuerpo técnico es lograr su participación en el Giro de Italia o en el Tour de France.
El Durazno y de paseo
La sensación que le quedó a los espectadores a la altura de El Durazno donde se marcó la primera meta sprit de la tarde, fue la de un “cicloturismo”. El pelotón mayoritario aprovechó ese tramo de la zona serrana para transitar relajados. Pero claro, lo más difícil estaba por venir.
En el pueblo de Dios
Los ciclistas alteraron la siesta en la localidad de Villa de la Quebrada. La meta sprint se instaló en la calle paralela que conduce a la iglesia, al costado del río que atraviesa el pueblo. Refugiándose del sol, los vecinos esperaron con los brazos abiertos que la fiesta multicolor llegara. La escena se repite en cada lugar. Todos esperan, con cámaras de fotos y celulares listos para capturar alguna imagen. Y al paso de los ciclistas, explota el aplauso siempre acompañado con gritos de aliento.
Al recibimiento, la Municipalidad sumó bebidas frescas, servidas a los reporteros gráficos que pararon ahí para hacer la foto característica del lugar.
Cobertura mundial
Como todos los días, periodistas y reporteros gráficos del mundo acompañan la cobertura a lo largo de la carrera, en diferentes vehículos que son exclusivos para la prensa. Además, hay 14 motos que trasladarán a fotógrafos y camarógrafos acreditados para tomar las imágenes que, después, recorren el planeta.
La misma escena
No importa cuál sea la hora, el itinerario, ni el tiempo que dure la pasada del pelotón. La gente sale a la ruta porque quiere ver a los ciclistas para alentarlos. La rotonda de La Punta que dirige al Mirador del Potrero fue la zona final de la competencia que reunió a una multitud. A lo largo de toda la subida, cientos de familias estacionaron el auto, instalaron las sombrillas y embanderaron todos los lugares que pudieron. “Este lugar parece un paraíso. No hay nadie que llegue hasta acá y no piense lo mismo. Es fantástico, nunca pensé que esto podía existir. Nos vamos sorprendidos”, dijo un turista de Río Negro que llegó exclusivamente para ver el Tour.