RUBÉN MAGNANO, DT DE BRASIL
“Brasil no es el favorito”
Rubén Magnano, el cordobés que llevó a Argentina en la cima pero ahora dirige a la Verdeamarela, respeta demasiado a la Selección con vistas al duelo de octavos, este domingo a las 17 en Madrid. Consultado sobre la paternidad de los últimos años sobre su Brasil, el DT fue claro: “A mí no me pesa en absoluto”, le dijo a la ANSL.
Cuando se le pregunta, en broma, si cree que enfrentar otra vez a la Argentina es un castigo divino por haber firmado con Brasil, Rubén Magnano se ríe. Y luego se pone más serio. “Son verdaderamente desafíos muy curiosos. Esa fue la pregunta que me la hice cuando firmé contrato en el 2010. Y se ve que me ponen a prueba cada año (sonríe)… Pero son las cosas lindas del deporte, de esta profesión. Un entrenador sin desafíos tendría que dejar de entrenar. Y, para mí, dirigir a Brasil y en contra de Argentina, es un desafío”, responde ante la prensa argentina, que quiere saber qué siente el cordobés en las horas previas de otro choque contra su país, al mismo que llevó hasta el subcampeonato mundial y el oro olímpico. Este domingo, desde las 17 (televisa Canal 13), será el clásico sudamericano por los octavos de final del Mundial, en Madrid.
A Magnano se lo nota tranquilo. Luego de tantos enfrentamientos en los últimos años, asegura que lo toma de otra forma. “Cuando me tocó en el Mundial 2010, me sorprendí. También en el 2012. Pero ahora ya no… La chance estaba y sabíamos que podía pasar, sobre todo luego de la derrota de Senegal. En los últimos tiempos hemos disputado casi una decena de partidos y mi duelo está madurado. Ya estamos pensando en los Scola, los Prigioni y los Campazzo, respetando a cada uno de ellos”, asegura en diálogo con Agencia de Noticias San Luis, luego del entrenamiento del viernes por la noche.
-¿Y qué viste de distinto en Argentina? ¿Te sorprendió algo?
-Sorprender no me sorprendió nada. Los referentes siguen tomando la posta y le dan lugar, con mucho apoyo, a la gente joven. Están dejando una escuela. Y en el estilo no noto nada extraño para ustedes y quienes siguen a la Selección hace años: un juego altruista por excelencia, con el pase como elemento primario de juego y eso en un equipo es algo difícil de controlar.
-¿Y cuál es el valor diferencial de este Brasil con respeto a otros?
-No está muy lejos de otros. Es casi el mismo equipo que en los Juegos Olímpicos, sólo con la llegada de Rafael por Caio Torres. Incluso estamos bastante parecidos a nivel de resultados. No veo mucha diferencia.
-¿Cuán buena fue la primera fase de Brasil?
-Fue realmente buena. Le ganamos a dos grandes equipos como Serbia y Francia, aunque también hicimos muy malos primeros 10 minutos contra España. Eso fue lo peor, luego se jugó bien, se defendió bien y por eso terminamos segundos. Estamos confiantes (sic), tranquilos, esperando el juego…
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-¿Notás una solidez de grupo, de compromiso, de que todos tiren para el mismo lado?
-Creo que sí. Cuando Brasil quedó fuera del Mundial, en Caracas, comenzó a gestarse algo importante, con un resultado valioso como es la presencia de los mejores jugadores aquí. Este es el mejor Brasil que se puede tener. Y esto provocó un alto grado de compromiso. Hace 40 días que veo eso, hay una relación muy alta entre lo que se dice y lo que se hace. Incluso, ahora, en el triunfo, más sólido los noto. Por eso digo que estamos bien.
-Argentina le ganó siempre a Brasil en partidos decisivos: 2010, 2011 y 2012. ¿Eso lle puede pesar al jugador brasileño?
-Yo creo que cada uno, en estas instancias, vive procesos interiores que merecen respuestas particulares. A mí no me pesa en absoluto, tenés que preguntárselo a ellos.
-Argentina siempre eligió la estrategia de liberar a Huertas pero aislarlo del resto. ¿Esperás la mismo de Lamas?
-Sí, creo que hará lo mismo, porque le ha dado resultado siempre. Estará en la habilidad nuestra de saber atacar esa estrategia. Esto es un juego de tácticas y así será el domingo,
-¿Brasil es favorito?
-No somos favoritos, sólo competidores y tenemos enfrente a Argentina, que no es poca cosa.
-Argentina siempre respondió en estos partidos, pero tiene mucho jugadores jóvenes, que tienen que aprender…
-(Interrumpe) Van a tener que aprender, siempre digo que la experiencia no la comprás. Y a veces hacés experiencia a través de victorias y, en otras, con derrotas..
-Por esta cantidad de chicos, ¿no creés que Argentina llega más al límite, con lo justo?
-Ocurre que no están presentes una cantidad de jugadores soberbios, de iluminados. Estamos haciendo comparación al límite de ser odiosa. Estos chicos tienen que hacer un curso acelerado de competenica internacional, pero ya han demostrado que pueden tomar la posta de las estrellas. Hay una estirpe, una conciencia, que se sigue respetando. Y eso cuenta.
-¿Ves similitudes en este Brasil y la Argentina histórica?
-Me animo a decirte que hay necesidades de victorias, de ganar algo. Argentina lo ha demostrado, ya ganó. Brasil debe hacerlo. Es una materia pendiente.
-En Brasil lo toman como un partido clave, como que es ahora o nunca. ¿Se siente esa presión?
-En Londres escuché la misma palabra: es ahora. Yo soy un profesional, que quiere ganar ayer, ya no hoy. Pero no me preocupo tanto por el ahora, sino más por el mañana.
