HISTORIAS DE LOS MUNDIALES
“Pilchas” para vestir de gala
En los mundiales no sólo participan las selecciones. Las marcas que visten a los equipos pelean en el mercado con sus modelos y visten de gala a los países. Presentaciones, indumentarias oficiales y guerra de marketing, todo parece calculado. Sin embargo, haciendo un repaso por la historia encontraremos historias insólitas, olvidos inexplicables, cábalas y rarezas de todo tipo.
El marketing deportivo es parte central de los mundiales desde hace algunas décadas. Figuritas, revistas, libros, gorro, bandera y vincha. Y también camisetas, tal vez el punto más débil de los que amamos al fútbol. ¿Quién no vistió una camiseta de fútbol en algún momento de su vida? ¿Quién no quiere tener la réplica exacta de la vestimenta de su club? ¿Y los regalos? Siempre algún familiar futbolero optará por regalarnos una.
Las marcas saben de esto y cada año sacan nuevos modelos. Algunos terminan siendo aberraciones, que años después serán adquiridas como rarezas. Y cuando llegan los mundiales la cosa se pone mejor aún. Todo coleccionista (y vaya que hay muchos) quiere tener al menos algunos modelos mundialistas. Y esos modelos están a disposición
Adidas tiene bajo contrato a las selecciones de Argentina; Alemania y España entre las más destacadas. Nike se quedó con Brasil; Inglaterra; Portugal y Francia, mientras que Puma se mantiene con Italia, su equipo más fuerte para intentar levantar la Copa. También están las camisetas africanas, siempre atractivas, y las selecciones que aparecen pocas veces.
* Las camisetas han sido un tema en casi todas las copas mundiales. Incluso en la primera, Bolivia, que vestía de blanco, se tuvo que enfrentar ante Brasil, también vestido de blanco. Entonces, los del altiplano tuvieron que pedir prestadas las camisetas de la selección uruguaya para poder distinguirse de sus rivales y no confundir al público.
* Algo parecido sucedió en Argentina 1978, cuando en la Ciudad de Mar del Plata se enfrentaron Francia y Hungría, partido para el que ambos fueron con los colores alternativos: el blanco. Aunque hoy parezca mentira, los galos tuvieron que salir por la ciudad a buscar un club que les prestara un juego de casacas. Así fue como el partido contra la selección magiar lo jugaron con las camisetas del club local Kimberley (verde y blanco con franjas verticales). Con esos extraños colores Francia consiguió su único triunfo en la Copa.
* Las camisetas de clubes en las Copas Mundiales fueron incorporadas por necesidad debido a la similitud de indumentarias y la falta (u olvido) de vestimenta alternativa. Al tercer puesto de la Copa de Italia 1934 llegaron Alemania y el Wunderteam de Austria. Ambos se presentaron con sus kits de camisetas blancas y pantalones negros. Los austriacos que conformaban aquel equipo maravilla, utilizaron la camiseta del Nápoli, club de la ciudad donde se definió el partido por el último lugar del podio.
* En el grupo 1 de Brasil 1950 chocaron Suiza y México en Porto Alegre. Por aquellos años los mexicanos tenían su camiseta titular, que era de color bordó. Ante la similitud de los colores con su rival y después de 25 minutos de demora en el inicio del match, los norteamericanos vistieron los colores de Esporte Club Cruzeiro de Porto Alegre (albiazul con franjas horizontales). Esa también fue la última copa en la que la selección de Brasil vistió de blanco, ya que fue considerado “mufa” tras perder la final en el Maracaná.
* El partido inaugural de Suecia 1958 enfrentó a Alemania Federal con Argentina. Los alemanes venían de ganar la Copa de 1954, mientras que Argentina retornaba a los mundiales tras 24 años de ausencia. La similitud de los colores en la vestimenta obligó al equipo sudamericano a utilizar el color amarillo del club local, IFK Malmö. Los alemanes ganaron por 3 a 1.
* En la Copa Mundial de Italia 1990 Costa Rica jugó dos encuentros en Genoa, uno en Turín y los octavos de final en Bari. En el segundo partido del grupo, ante Brasil, en el Stadio Delle Alpi, la casa de la Juve, el conjunto “Tico” lució una casaca poco tradicional en su vestimenta. Fuera del Rojo titular, o el blanco que utiliza como color alternativo, los centroamericanos salieron a la cancha con una camiseta albinegra con franjas verticales, tal como son los colores de Juventus.
Muchos creyeron que utilizar la casaca de la “Vecchia signora” era para comprarse al público local (cosa que sí sucedió); pero más allá de esa intención secundaria, la camiseta no era la del club turinés, sino que Costa Rica llevó aquella vestimenta en homenaje al Club Sport La Libertad, el decano del fútbol del país.
* Inglaterra quedó ligada a una historia poco común con las camisetas, en ambos mundiales de México. En la copa de de 1970, los ingleses lucieron tres vestimentas diferentes. En sus dos primeros partidos, contra Rumania y Brasil, salieron al campo de juego con su tradicional camiseta blanca, para el tercer partido, contra los checoslovacos, utilizaron la tercera, de color celeste. Algo no muy común en aquel entonces.
Ya en cuartos de final, los que hasta ese momento defendían el título de campeones mundiales, cayeron 2-3 frente a Alemania Federal (subcampeones de 1966). En esa ocasión los ingleses se calzaron la primera casaca alternativa, que era de color rojo. La misma con la que habían ganado la copa cuatro años antes y frente al mismo rival.
* Veinte años más tarde, en 1986, Inglaterra tenía que medirse con Argentina, en cuartos de final. Los dos goles que inmortalizaron a Diego Maradona también esconden una historia de camisetas. Argentina se presenta en el campo de juego con una casaca azul, muy diferente a la que había utilizado ante Uruguay en el partido por octavos. El escudo lucía muy diferente, también el logo de la marca (Le coq sportif, subsidiaria de Adidas) y los números eran plateados. No era la tercera, sino la cuarta alternativa, ya que Argentina había llevado a México un tercer modelo de color blanco.
Carlos Bilardo, previsor por sobre todas las cosas, le había pedido a los fabricantes de la camiseta que crearan un diseño que fuera más liviano, para que los gramos extra que dejaban la transpiración no se quedaran en la prenda y no le pesara a sus dirigidos. El calor de México era más intenso con los partidos jugándose al mediodía.
Tras el pedido, la empresa aplicó una nueva tecnología y la prenda titular lucía pequeños agujeros que hacían escurrir el sudor. Pero por falta de tiempo el “air-tech” no pudo ser introducido en la camiseta suplente. Luego del partido contra Uruguay, donde Argentina visitó de azul, el entrenador tomó una prenda y notó la diferencia de peso: “no podemos seguir jugando con estas camisetas”, sentenció. Se sabía que ante los ingleses había que utilizar nuevamente el azul, así que le solicitó a Patricio D’Onofrio, representante de la marca, que fabricara de manera urgente un modelo con agujeros: “Imposible”, fue la respuesta que recibió.
Terco como pocos, Bilardo le ordenó a Rubén Moschella, un empleado de AFA, que buscara camisetas azules en el Distrito Federal. Moschella consiguió un par de modelos, pero ninguna tenía “los agujeritos”. Diego Maradona llegó a tener en sus manos esas camisetas y, seleccionando una, le dijo al técnico: “Qué linda ésta. Con esta camiseta le ganamos a Inglaterra, Carlos”. El modelo era diferente al que entregaba la marca porque eran camisetas con bastones en dos tonos de azul. Pero igualmente se obtuvo la aprobación.
Inmediatamente se mandaron a confeccionar los escudos a bordadoras del club América, ya que el empleado de AFA había ido a comprar cuatro decenas de casacas iguales a las que había elegido Diego. Sólo faltaban los números, y ante el apuro, se consiguieron unos plateados que eran de football americano. La camiseta elegida por Maradona ya estaba lista y el 10 se preparaba para jugar el partido de su vida.
No hay manera de que las camisetas queden afuera de la historia de los mundiales. Son la vestimenta para la gala de esta fiesta del fútbol. Hoy no existe la improvisación, nadie olvida una camiseta alternativa y de antemano se sabe con qué colores se juega. Ahí están los nuevos modelos, esos que serán expuestos en todas las tiendas, listos para ser lucidos al mundo entero. De todos modos, nada indica que no sigan apareciendo hermosas historias con las camisetas de las selecciones.
Fuente y fotos: Agencia Télam